viernes, 23 de mayo de 2008

El Pan de Anís

Heeeeeeeeeeeey!!! Omití mi nombre en elcuento!!!!!!!!!!!
Aquel cuento de abajo es míoooooooooo:
Viviana López Torres

:)

El Pan de Anís

Terminamos de comer y de nuevo nadie se había comido el pan de ánís que habían traído casi hace una semana de El desierto de los leones. Yo lo vi y dije: ¡cómanselo!- me esiré para alcanzarlo y noté que ya estaba algo duro.
-Tiene hongos- dijo mi hermano René, un chico de 14 años, delgado, con corte de melena color café castaño, quien se mantenía aljado de él.

-¿Hongos?- preguntó mamá incrédula a tal afirmación. Sus pestañas estaban abiertas casi como la cola de pavo real. Tal vez no sea la major descripción, pero fue lo primero que se me vino a la mente al ver tremendo asombro en ella. Pero seguro has notado alguna vez como los pavo Reales han cambiado de tener su cola delgada y desapercibida a un tremendo abanico llamativo y extravagane. Y sí, justo así fue como se abrieron sus pestañas. Tendrías que haberlas visto.
Y como sonaba tan convincente, mamá y yo voleteamos a verlo y casi al unísono preguntamos -¿dónde?-
René muy decidido tomó aquel trozo de pan y lo volteó. Una pequeña cosita verde, como la lama que se pega en las rocas de las lagunas, estaba comenzando a salir. No era mucha. De hecho era apenas visible. Pero en efecto, René estaba en lo correcto.
-Pues es que ustedes no se lo comen- argumentó mamá. Vestía un pantalón de mezclilla y una blusa morada. su típico peinado con fleco de arcos y su cara con rubor. -Todos los´días ahí ha estado y no le hacen caso. Bien les dijo don chepe que les dejaría pan con la condición de que se lo comieran. y ustedes dijeron que sí, y miren...-
Percibí que nos estaba culpando a nosotros de algo en el que todos teníamos la misma culpa (en caso de llamarle así). Si es cierto que nosotros no lo habíamos comido, ella no culpa podría librarse de estar en la misma situación.
-¡Cómanselo!- decía como si on su discurso nos hubiesemos sentido con algún remordimiento.
Yo estaba satisfecha. Habíamos comido un plato muy completo de tres tacos de pollo conensalada de arroz. Y después de lo de los hongos... no me iba a comr ese pan.
-¡No me cabe má! además no se me antoja- dijer retirando un poco los platos de la comida.- ¿Poruqé no te lo comes tú?- pregunté con la curiosidad de ver qué excusa iba a poner en su defensa.
-Ah, pues a mi tempoco me cabe. Comí mucho, hija.- y se levant+o de la mesa con los trastos que luego dejó en el fregadero de la cocina. Mi hermano se fue a su habitación. ¡Y ese pan...! ese pan se sumaba a no sé cuantos más bolillos que ya se habían podrido que había descubierto no hace mucho tiempo arriva del refrigerador. Muy puestos en sus bolsas de papel café,amarrados con una bolsa de plástico. No eran dos ni tres; eran fácilmente cuetro bolsas que, cuando me quise preparar una torta, encontré con más de un bolillo intacto, enlamado y duro, por el olvido de mamá. o almenos eso quiero pensar...

Permanecí en la mesa un rato. Viendo en ese pan de anís... la satisfacción que nos pudo haber traído si hubieseestado fresco; una rica merienda sumergiéndola en una taza de chocolate espumoso, un desayuno en donde se le untase meremelada de zarzamora, una comida en la que a la hora del postre se le pone una rebanada de delicioso ate de guayaba... ¡y todo para que ahora solo fuera un pan duro más que terminaría en la basura? No podía permitirlo. Me inquietaba en cierto modo. Algo debía hacer con ese pan de anís. algo que, porsupuesto, no fuera deshecharlo. Y tenía que ocurrírseme algo pronto, porque mamá no tardaría en desaparecerlo. ... o almacenarlo en su "reclutamiento de panes".

Pasado un rato mamá salió y yo aún no sabía exacatamente que iba a hacer. ¿dárselo a un vagabundo con el riesgo de que me lo botara enla cara, ir en busca de un perro callejerohambriento que puede que me lo arrebate con todo y manoademás de pasarme un cúmulo de pulgas, ir a las plasas del Distrito Federal en busca de palomas...? y ¿si no encontraba palomas? yo quería que no se desperdiciara ese pa, quería hacer algo de bien, algo en lo que se aprovechara. Mi conciencia me decía que yo tenía que encontrar una solución, una buena alternativa, una...
-¡Ya sé!- Pensé -¡Los patos!
Cerca de donde vivo hay un parque con un estanque, y ahí hay muchos patos. Generalmente todo el tiempo están hambrientos. Pues son pocas las personas que se acercan a soltar algunos trozos de tortilla o migajas de pan. Y no así los patos que en el afán de saciar su hambre llegan en decenas hacia el alimento escaso que les arrojan.
Se me acababa de ocurrir una gran, gran idea en la que todos salíamos ganando: mamá se desharía del pan, el pan no se desperdiciaría, yo haría una acción buena y los patos comerían. ¡Eraalgo estupendo! Así que sin pensarlo dos veces, subí, le dije a René que saldría un momento y que si mamá regresaba y preguntaba algo, le dijera que me había eshecho de su pan "hongueado".
Bajé las escaleras, tomé el pan, lo guardé en una bolsita, saqué la bicicleta y me dirigí al estanque.
Ahí estaban. Patos y patos nadando en sus aguas. y yo..., yo me sentía muy alegre. Era un sentimiento tan intenso que sentía que se desbordaba de mi corazón.
Me acerqueé a la orillay de jeé la bici. Saqué el trozo de pan de anís y conencé a hacer un sonidito conl a boca parecido al que hacen las besuconas para que se acercaran.
¡increíble! Apenas los llamé y se acercaban unos tras otros como si supieran a lo que había ido. Corté unos trozos y los empecé a a roojar. ellos graznaban agradecidos, y más patos eran atraidos; blancos, negros, cafés y verdosos, grandes, medianos y pequeños...
Muchísimos patos estaban siendo alimentados por un pan que pudo haber terminado en el basurero. y yo me sentía con mucha dicha :)

El pan se terminó, y lo creas o no, hubo patos que se quedaron sin probarlo. Y los que lo hicieron se quedaron con ganas de más. No me quedó más que decirles: ¡Adiós Patos!. doblé la bolsita y lo guardé en mi pantal´´on. subí a la bici, y antes de arrancar volteé y los vi. Sentía cosquillitas en el estómago. sonreí y part+i.
Al llegar le conté a mamá. Estuvo escuchando mi relato, y de vez en cuando sonreía.
Mamá se propuso ser más cuidadosa con los alimentos. Y prometió hacer todo lo posible para que, si alguno se le llega a escapar, antes de deshecharlo, tratar de ver si puede servir para algo. Como ayer que se encontró con unos jitomates pasados, y los utilizó de abono para sus plantas, cuando fue a ver a su mamá y le dijo que con el pan duro hiciera pan molido, cuando sugirió en una tortillería que las tortillas que se les secaran las hicieran totopos...
El resultado tan grande que produjo...: un Pan de Anis.

ZENHYR por ANDRES CRUZ

Esta es la historia de un trol llamado Zenhyr. ¿Los conoces? Los trols son personitas no más altas que la palma de tu mano y con poco dote de belleza.
Zenhyr , una persona valiente, corajuda, trabajadora honesta e inteligente se dedicaba a ayudar a su tía Zula con la cual vivía desde que tenía uso de razón. Sus padres lo abandonaron desde recién nacido durante una guerra contra los elfos, donde ambos padres perecieron. Todo por una absurda riña entre quien era más bello que el otro.
Los trols decían que la belleza interna era la mejor y los elfos decían que la belleza externa era lo que le daba presencia a las personas; los elfos eran bellos por naturaleza no tenían ninguna imperfección solo las orejotas y caras afiladas que cuando Zenhyr veía en alguna ilustración o dibujo soltaba tremenda risotada.
Zenhyr no hacía mucho, solo los quehaceres de la casa que le correspondían y labrar el campo que tenia al lado donde cosechaba frutihongos, que para un trol tan fuerte como él no era gran problema; los frutihongos eran muy famosos en la villa donde vivía dado a que una vez que los comprabas y pensabas en la fruta que quisieras comer se transformaba en ella con todo y su sabor ,esto era único y otra de las razones por la cual los elfos hacían guerras a cada rato con los trols, deseaban tanto ese hongo que también servía para brujería y encantamientos.
Un día Zenhyr mientras dormía escuchó unas delicadas voces sin más ni más se levanto y asomó por la ventana que daba al campo, no distinguía muy bien lo que era, solo dos siluetas una baja y ancha, y una alta y delgada , era el jefe de su villa Faragor y un elfo de la villa enemiga, un mensajero el cual llevaba un sobre que apenas y se podía distinguir. Zenhyr bajó los escalones de su cuarto, atravesó la cocina y salió sigilosamente por la puerta trasera de la casa hacia su campo, se arrastró y acercó lo más que pudo a la intrigante reunión, llego atrás de un montón de frutihongos recién cosechados y empezó a escuchar la plática entre el trol y el elfo. El mensajero decía que Turoc, rey de los elfos quería parte del territorio trol que constaba del bosque áureo llamado así por que cada vez que salía el sol los arboles parecían hechos de oro y el lago zafiro que cuando anochecía desprendía una pequeña luz que tornaba este lugar con el color que se le hacía llamar, ambos lugares se encontraban cerca de la casa de Zenhyr, Faragor enojado y alzando la voz, vociferó:
- ¡Dile a tu rey, que los trols no cederemos nuestras tierras solo porque a un elfo tonto se le dé en gana, así que si quiere guerra la tendrá, yo no me opondré pero juro que no descansaré hasta acabar con cada uno de ustedes!
El elfo cambio la cara al ver la furia del jefe trol, el mensajero solo dijo:
- Está bien si eso gusta usted se lo diré a mi rey.
Y el elfo desapareció entre un humo de color plateado, lo mismo hizo Faragor pero su humo era de un color esmeralda.
Zenhyr se quedo preocupado, ya no era una riña entre quien era el más bello ahora se disputaban el territorio, no sabía si contar lo sucedido a su tía o si quiera al pueblo, no sabía qué hacer pronto se acercaría a una guerra y no tenía idea alguna de cómo eran esos sucesos, por primera vez en su vida tuvo miedo y el trayecto de ella también había cambiado.
Regresó a su cuarto pensando en lo sucedido y cayo rendido en la cama, al día siguiente un pequeño rayo de sol que entró por la ventana lo despertó, él se levantó , vistió y siguió pensando en lo ocurrido, así que decidió hablar con su tía Zula , llegó a la mesa en donde ya estaba servido el desayuno; panqueques con miel de abeja y moras silvestres que aunque era su platillo favorito para empezar el día no lograba consolar el vacio en el estomago del muchacho, al recordar la guerra proveniente , decidió saludar a su tía con un cordial beso en la frente y sentarse, se llevo un primer bocado de desayuno a la boca y sin rodeos -pregunto a su tía-
- ¿Qué haríamos en caso de una guerra?
- la tía rió y dijo:
-¡Guerra, no seas tonto nunca mas tendremos una, hay un tratado de por medio con los elfos, para estar en paz total!
Zenhyr quedo más preocupado pero una pequeña chispa de valentía lo empezó a cubrir y dijo:
- Descuida tía yo peleare y defenderé al pueblo que me crio.
La tía esbozó una sonrisa, le acaricio el cabello como a un niño pequeño y comentó:
– ¡Ya basta, pongámonos a trabajar¬!
Así paso el día y zenhyr no detecto destrozo alguno en la villa así que decidió olvidar la reunión de su jefe y el mensajero de la villa enemiga pensó que todo esto era una broma de pacotilla entre los dos pueblos y él era el único tonto que había caído sonaba absurdo pero solía suceder.
Hasta que una noche escuchó un estruendoso ruido que se asemejaba a la bala de un cañón siendo proyectado el despertó y a lo lejos vio parte de su villa en llamas. Despertó a su tía zula y ---dijo -Tía, ve lo que sucede, la tía hizo lo que su sobrino se asomo por una ventana de la casa y el miedo se apodero de ella, soltó un grito ahogado y al ver esto zenhyr la tomo del brazo y pregunto-¿Qué sucede tía?, su tía contesto con otra pregunta -¿sabías algo de esto?-
Zenhyr asintió con la cabeza, -¿Y porque nunca me lo dijiste? -dijo la tía-.
- Es que no quería espantarte, pensé que lo que decía Faragor al mensajero elfo eran puras tonterías –dijo Zenhyr.
¡Tonterías, es una guerra la que ha comenzado! ¬¬¬–Gritó la tía Zula-.
Zenhyr no pensó mas la chispa de valentía se empezaba a encender, tomó su hacha, abrió la puerta de su casa voltió hacia su tía y dijo - Escóndete y no me esperes podría no regresar.
Al oír esto su tía se soltó a llorar y pregunto:

-¿A qué te refieres?-
Zenhyr solo rió y se fue entre las penumbras de la noche. Zenhyr corrió hacia la villa en donde vio agrupado a un montón de trols se acercó y observó a su jefe Faragor que decía:
– No quería que esto sucediera así pero pasó estamos en guerra con los elfos por las causas siguientes: quieren nuestros territorios; habló del bosque áureo y el lago zafiro.
Todos aterrorizados se voltearon a ver, no sabían quehacer hasta que un trol de entre la multitud exclamó:
– ¡No me importa lo que tenga que hacer yo luchare junto a ti Faragor y protegeré mi villa!
Todos voltearon a ver quien decía esto, era Zenhyr quien había dicho esto. La gente empezó a tomar coraje y uno a uno empezó a decir:
– ¡Yo también estoy contigo!-
Una vez sucedido este valeroso acto Faragor dijó:
– ¡Esta bien, tomen armas de sus casa lo que sea, lucharemos y protegeremos la villa!
– ¡Muchacho, tu serás mi jefe de batalla, así que toma la batuta! – Dirigiéndose a zenhyr, el muchacho asintió.
Zenhyr, sin rodeos alzó la voz y dijo:
– Vamos, apúrense lucharemos por lo que nos pertenece, avisen a todos los que deseen luchar que nos veremos cerca del bosque en una hora armados y preparados, los que ya estén listos acompáñenme , zenhyr guió al grupo por los senderos que daban hasta el bosque.Faragor que iba dentro del grupo se puso a lado de Zenhyr y lo cuestionó:
– ¿Cómo te llamas?, Zenhyr – respondió el pequeño joven
–Fuiste el primero en ayudarme ¿Por qué? – dijó Faragor
– Veras es que escuche tu conversación entre el mensajero y tú la otra noche cerca de mi casa y no pude dejar de pensar en eso día y noche , hasta que llegue a la conclusión de que yo lucharía por mi villa pase lo que pase y si este es mi momento no lo dejare ir .
– Bien muchacho, te sigo – dijo Faragor
Al cabo de una hora se reunieron miles de trols a la orilla del bosque iluminado todos con armas de casa, arcos y flechas que tenían, lo que tuvieran a la mano.Todos hablaban y relataban como destruirían a los elfos, unos temerosos no decían nada
Faragor hablo fuerte y claro:
– Amigos, aldeanos, compañeros de guerra, cállense y escúchenme un momento, estamos en guerra se que no lo advertí con tiempo pero no pensé que esos asquerosos se armaran de valor así que solo diré esto he llegado a confiar en este muchacho llamado Zenhyr no lo conozco mucho pero sé que es valeroso y será el jefe de batalla así que acaten sus ordenes y luchen por nuestra villa, así que preguntó, están conmigo y los trols reunidos gritaron al unisonó:
– ¡Estamos contigo!
– Zenhyr toma la palabra, desde ahora solo te seguiremos a ti, jefe – dijo Faragor – sonrió y se puso al lado de los valientes soldados.
Zenhyr no tardo ni un segundo en tomar la palabra y dijo:
– ¡Amigos no tenemos tiempo la villa ya está siendo atacada solo lo que haremos será luchar con el corazón, rodearemos la villa y de ahí atacaremos hacia el centro así tomaremos por sorpresa a los elfos que ya se encuentran dentro de la villa y otro grupo atacará de frente a los enemigos eso servirá de ataque defensivo hagan esto y ganaremos, así que cuento con ustedes – y gritó como si fuera lo último que diría en su vida –¿Qué somos? – y al unisonó escucho las miles de voces a su alrededor gritando con euforia – ¡Trols!
–¡ Así que ataquen! – gritó Zenhyr y empezaron a correr hacia la villa los miles de trols que se convertirían en historia de la villa con su jefe de batalla al frente en cuanto empezaron a verse siluetas elficas quemando casas de la villa con encantamientos, estos se armaron de valor, la furia corría por sus venas y se abalanzaron sobre los elfos. Zenhyr saco su hacha y empezó a pelear y eliminar a cuanto elfo se le pusiera en frente, veía también que sus compañeros peleaban, era una ardua lucha se veían cuerpos regados de ambos bandos, llamas por todas partes, humo de colores debido a los encantamiento que se estaban usando, personas quemadas, muertos; él deseaba encontrarse de frente a Turoc al que tenía un rencor tan grande puesto que sabía que la muerte de sus padres fue gracias a él, lo repudiaba más que a nada. De pronto distinguió a Turoc peleando con mucho vigor y fue hasta él, así que ahí se encontraban los dos jefes de batalla, él sabía lo que tenía que hacer y era luchar contra Turoc, en eso de entre llamas apareció Faragor, como un trueno se dirigió hacia Turoc y empezaron a luchar tan ferozmente que parecían dos leones luchando por su territorio, no dejaban de atacarse con espada, golpes y patadas. Zenhyr mientras veía la pelea, fue atacado por dos elfos al mismo tiempo que también peleaban ferozmente, se concentró en su pelea, mató al primer elfo cortándole la cabeza con el hacha y al segundo le dio un tajo en el estómago, al terminar con ellos se dedicó ver como batallaban los dos jefes rivales tan vivazmente, de pronto todo empezó a pasar lentamente por la cabeza de Zenhyr hasta que en un descuido Faragor fue tocado por la espada de Turoc. Zenhyr gritó:
¡No, Ahora tu eres el que abandona la villa!, el recuerdo que tenía el muchacho de sus padres y de cómo abandonaron su casa le regreso a la mente, de un relampagueo volvió a la batalla, tomó la espada de su jefe, vio como Turoc el rey elfico reía victorioso, así que Zenhyr corrió hacia él y lo atacó con todas sus fuerzas, peleaban a todo lo que les daba el cuerpo. Zenhyr esquivaba los encantamientos que le lanzaba el elfo, el muchacho estocaba a más no poder, el cansancio lo inundaba pero su fuego interno lo mantenía de pie, en un infortunio para Turoc y ventaja para Zenhyr le logró cortar el brazo al elfo y acto seguido le empuño la espada que segundos antes le pertenecía a Faragor, se la enterró tan hondamente en el corazón que Turoc empezó a deshacerse como si fuera un hielo al sol y se desvaneció como un diente de león al ser pateado.
Al ver esto los elfos empezaron a huir llenos de miedo puesto que su rey el que les influía el valor para pelear había muerto. Los trols al ver esto – gritaron –¡Victoria, Victoria! una y otra vez, Zenhyr lloró de alegría ante todos, sus soldados lo levantaron en brazos y gritaron:
– ¡Viva nuestro rey!
Zenhyr se sentía más fuerte que antes a pesar del cansancio de la batalla, luego empezó a sentir como se iba de la escena y como un humo de color esmeralda lo envolvía.
Al día siguiente despertó en una camilla en el hospital de la villa, el doctor le contó que se había desmayado justo después de terminar la batalla y que al tomar la espada de Faragor había adoptado el trono. Zenhyr se levanto, el doctor intento detenerlo pero el muchacho dijo con voz severa:
– ¡No estoy bien me voy a casa! – tranquilamente tomó la espada de Faragor y salió del hospital. La gente gritaba como sacado de un cuento:
– ¡Viva el rey, Salve! –
Después de tanta fiesta Zenhyr, llego a su casa, en cuanto entró y vio a su tía la abrazó ella no lo podía creer su sobrino había regresado.
Él estaba muy maltrecho, serenamente pero alegre y dijo:
– ¡Regresé, pensaste que te ibas a deshacer tan fácil de mi! Oye tía nos mudaremos de casa ahora nos corresponde vivir en el castillo de la villa…
Y esta es la historia del trol que comenzó como campesino y que se volvió rey de su aldea al seguir sus instintos e ideales.La historia de Zenhyr es contada en la villa hasta nuestro tiempo y hay más anécdotas épicas en las que participo y salvó a su villa.

martes, 20 de mayo de 2008

AMARGA INTENSIDAD. by. Anna S. Plaza Lagos

Aquella palabra frustro sus sueños más anhelados, su vida planeada, sus días felices, aquella palabra lleno su vida de días amargos, de noches sin lunas, de vida sin vida. Lloró con un aire de desasosiego, de mortal desesperación, sus lágrimas caían a cantaros, su vida se desplomaba por aquel instante desolador, fatídico, inexplicable; inexorable. Y lloró una semana más y sin descanso, y su vida se torno sola, desastrosa, sin sentido.
Carlos había muerto, esta frase no paraba de sonar en su conciencia caída, en su abatida situación, ella no lo creía, su corazón no lo permitía, su mente lo sabía; ¡Carlos murió!, ¡Carlos murió! Y su amor no murió, pero su vida murió y sus cabellos y sus manos y su alma y su cuerpo entero murió junto con él. La vida ya no tenía sentido, intentaba dejar de llorar, intentaba que el dolor inmenso no acabara con su suerte extraviada, con su vida sin vida, con su amor sin su amor, sin su Carlos, sin su vida, sin su Carlos.
Aquella noche no durmió, veía sus fotos, veía sus cartas y cuando pensaba que el llanto cesaría un poco, leía un: “te amo”, y sus lágrimas rodeaban las cartas, los sollozos llenaban el cuarto, su amor sin receptor se oponía a ceder, el amor seguía vivo, él no. Y así pasaban los días y las noches sin poder entender que paso, ¡por qué él?,¡ por qué justo él?,¿ Por qué no los asesinos?,¿ Por qué no los narcotraficantes?,¿ Por qué no los secuestradores?, ¿Por qué no ella?. ¡Por qué no yo! Decía, ¡Por qué no yo!, ¡Por qué no me llevaste junto con él! – Reclamaba a un ser que perdió su creencia, que perdió credibilidad. La vida preguntó lo mismo sin respuesta aparente, Carolina no sabía qué hacer, no podía escapar de su dolor, de su terror por vivir, solo pensaba en recordarlo, y sin conciencia volvía a ver sus fotos, volvía a ver sus cartas y regalos y sollozaba y lamentaba y lloraba otra vez. Lo amaba, la amaba y de pronto se acabo todo.
De pronto alguien toco a la puerta, limpiándose las lágrimas, intentando aclarar la voz, Carolina disimulo su dolor estrujante, su dolor maloliente de tanto días, de tantas noches; para abrir la puerta, y dijo: ¿Quién es?
Era Leonardo su amigo de hace ya mucho tiempo. Tan pronto como abrió la puerta, abrazo a su amiga con un abrazo cómplice, con un lo siento inerte. Ella dijo sollozando- ¿Te enteraste de la notica?, le contesto que si, - Lo sabía desde hace mucho antes- contesto. Ella contó su dolor, su angustia, su pesar a su amigo, logrando reflejar un poco lo que sentía, y lloraba, el sólo respondía un simple si, continua. Suficiente para su alma atiborrada de sentimientos fúnebres.
Ella terminó con una pregunta que reclama, con una exigencia absoluta ¡Quién habría sido capaz de tal cobardía, de tal engaño fatal, de tal mordaz atrevimiento? ¿Quién?
El silencio permaneció por momentos incómodos, terribles. Los dos se miraban a los ojos. Y con un descaro feroz, el dijo a Carolina: ¡Yo fui!, ¡Yo lo mate!, lo mate con alevosía y con ventaja, ¡Yo fui!
Carolina, gritó de manera ensordecedora, casi equiparable a la vergüenza, a la mentira, a la traición que le propino Leonardo, gritó y lloró al mismo tiempo, quería matarlo a él también, quería desaparecerlo, estrujarlo, deshacerlo. ¡Por qué lo hiciste desgraciado!, ¡Por qué?, que te he hecho?, que te he hecho maldito infeliz! ¡Sabias que lo amaba, sabias que él era mi vida, mi todo!, ¡Lo sabías!
¿Qué, qué hiciste?, contesto Leonardo, me hechizaste con tus ojos, me perdí en tus caderas, en tu vida, ¿Qué hiciste?, me enamoraste, me embrujaste, me arrastraste. Eso hiciste Carolina, llenaste mi vida de amor, llenaste mis días de ti.
--Yo no hice nada de eso, te rechace cada vez que te insinuabas, te dije que solo seriamos amigos, te conté de Leonardo, te conté de el día a día, te lo contaba y tú sonreías, y tú me veías.
En efecto, así fue, pero eso me encantaba, me hechizaba, tú feliz, yo enamorado de ti, lo único que estorbaba era Carlos, tenía que matarlo antes de que te matara a ti.
Los ojos de Carolina eran agua, su corazón destrozado, devastado, arruinado, de todos podía pensar menos de su amigo, menos de su mejor amigo, ¡Por qué tu?,¿ por qué?-- reclamaba, una y otra vez, no podía esperar eso de él, era su único apoyo y la traicionó, que hacia Carolina si a la única persona con la que podía contar lo que le pasaba era justo el causante de todo. Ya nada tenía sentido.
Leonardo, se fue, y dijo: mañana vengo por la mañana, veras que crearemos un amor igual o mejor al que tenías con Carlos, lo aseguro. Ella grito: ¡Vete infeliz!, ¡Vete desgraciado!, ¡De ti no necesito nada!
A la mañana siguiente, Leonardo compro un ramo de flores y llego después de un rato a casa de Carolina, toco, nadie abría, él abrió la puerta con entera confianza, la sangre corría desde el cuarto hasta la entrada. Carolina había muerto.

Los que no quieren morir........

Era un día muy soleado, el calor llegaba a los 35 grados, adonde el trafico en el
Distrito Federal era insoportable parecía un estacionamiento gigante por la zona del
Periférico, poco a poco crecía el calor mas y mas, un sol seco, de esos que pegan
en la piel y sientes que te quema, con un olor a combustible de los carros, también
un olor a llantas quemadas, todos los olores se combinaron en un masa de la
contaminación que había en ese día, en uno de esos carros que estaban en el
tráfico , se encontraba una familia completa, mama, papa, hijo e hija, que solamente
se podrían cubrir del calor mediante el segundo piso que les tapa un poco el sol pero
aun así era insoportable.
En uno de esos momentos la hija pequeña, se desespero tanto que le pregunto a su
papa ¿Oye papa esto no es normal, que es lo que pasa?. El papa detenidamente
volteo hacia el espejo retrovisor y vio a la niña sentada con un juguete en la mano un
poco preocupada, a lo cual respondió el papa…..
¡ Es normal hija!. Somos demasiados, mmmm…… ya somos demasiados! Con un
gesto de preocupación. La niña se quedo contenta y siguió jugando con la muñeca.
Estaban escuchando la radio, con la canción favorita tanto de la mama como el
papa, en eso callo una lagrima de la mama sobre su brazo, recordando cuando se
conocieron, cuando se casarón y mas cosas.
El hijo de un momento a otro, preguntó por mama ¿Que tienes mami?, la mama
limpiándose las lagrimas, pero con una sonrisa que las mamas siempre nos dan,
contesto – es que esa canción me recuerda cuando conocí a tu padre--- y luego una
risa……los papas habían ocultado perfectamente una mentira, los papas ya sabia
que es lo que había pasado… no querían espantar a los hijos.
No habían avanzado en el tráfico, con un silencio entre la familia muy muy raro, y de
un momento a otro en el coche se escucho un golpe, muy fuerte al cual el papa
volteo a la ventana del carro, asustado, pálido, gélidas sus manos, era el Viene ,,
viene, !!!!!!!!!!!!! que susto!!!!!!!!!! El cual se quedo viendo hacia adentro del carro muy
asustado, corrió a pedir ayuda, adentro del carro la familia no sabía que pasaba,
poco a poco se escuchaban las ambulancias alrededor del carro, los hijos
comenzaron a llorar, la mama y el papa a tratar de calmarlos, pero no podían, en un
momento se escucho como se rompía el parabrisas, un paramédico estaba
metiéndose por ahí mismo, era trágico lo que pasaba, la niña vio como su cuerpo
salía en una camilla, a lo cual la niña grito de una manera impresionante, con un
temor, después ella vio como su papa, su mama, su hermano la introducían en un
varias ambulancias, era un ruido estruendoso, las luces de color azul y rojo
iluminaban el carro, poco a poco se fue vaciando el carro. Pero la famila seguía
adentro, se dieron cuenta que una grúa orillo el caro.
No se podía explicar que era lo que pasaba, estaba muy asustados, ellos no sabían
que era lo que sucedía, cuando por la radio se anuncia que en Periférico había caído
un camión de gas del segundo piso sobre un carro con una familia adentro.
Era muy dramático, se quedaron anonadados por la noticia, mientras la gente se
asomaba para ver que era lo que había quedado en el carro después de que lo
habían aplastado. Hasta que se dieron cuenta que verdaderamente estaba muerto,
pero al parecer , ellos no querían, eran demasiado jóvenes para morir. Ahora
entendía los hijos del porque el papa, preocupado y la mama llorando eso eran lo
que ocultaban. Los papas voltearon a ver a los hijos explicándole lo que había
pasado.
Así fue la historia de esta familia que nunca quiso morir, los padres siempre tan
cuidadosos de sus hijos sin quererles decir nada como usualmente pasa…..


ROY
SIEMPRE PARA MI POR: LIZZETH SÁNCHEZ
Ella es Laura, una joven cualquiera, estudiaba la universidad, era una chica muy linda, agradable, hacia amigos con gran facilidad, poseía un lindo carácter, era amable, siempre se preocupaba por los demás, podríamos decir que entendía el verdadero significado de la amistad; tal vez por eso tenia muchos amigos.
Sin embargo tenia un defecto, siempre dependía de los demás para sentirse bien, necesitaba la aprobación de alguien más para ser feliz, era tan sensible que cualquier cosa que le pasara a alguien que ella estimara por mínima que fuese la ponía triste, se sentía mal, ella no entendía muchas veces por que sentía todo esto, era tanta su confusión como la que yo tengo en este momento tratando de explicarte como es Laura así que mejor te voy a contar como pasaron las cosas, tal vez, a ti te ha pasado.
-¡Laura, Laura!-gritaba desde el otro lado del patio, Paola. Laura volteó hacia la dirección de aquellos gritos y cual fue su sorpresa al ver que su amiga Paola estaba mas cerca de lo que imaginaba, -Laura, ¿Ya fuiste por tus calificaciones?-preguntó Paola.
Laura le contestó que no, pero que sería buena idea ir en ese momento ya que no tenia nada que hacer. Las amigas emprendieron camino hacia el lugar donde estaban entregando las boletas.
Laura se acerco a pedir su boleta, se la entregaron y lo único que hizo al verla fue guardarla como pudo y salir de aquel lugar. Paola solo quedo muda ante la actitud de su amiga.

No te voy a hacer un cuento largo así, que sigamos a la protagonista y olvidemos a Paola.
Laura estaba sentada en el primer escalón de una larga escalera y sus lágrimas regaban con agua de tristeza las rosas de su mamá, se sentía tan triste, lo sorprendente es que no era por ella, si no por sus padres, que pensarían, que tristes se pondrían al saber que había reprobado una materia.
Pobre Laura en realidad se sentía muy mal, estaba tan concentrada en ese que no noto que había alguien ahí, si, era Canela, su pequeña perrita, Canela dejo caer en las piernas de su dueña su pelota roja, la miro con esos grandes y hermosos ojos cafés, movió su rabito, brinco de un lado para otro, Laura sonrió, seco sus lagrimas y aventó la pelota, Canela corrió tras ella, tan rápido como sus patitas se lo permitieron, pero al regresar a buscar a su dueña solo encontró la puerta cerrada, su ama ya no estaba.
Laura se sentía mejor hablo con sus papas y se comprometió a mejorar aquella calificación, mas no se sentía del todo bien.
Pasaron los días y tal parecía que era el mes de mala suerte de Laura. -Sí se que no me entiendes así que te voy a seguir contando-.
Una semana después de las calificaciones Laura tuvo una fuerte discusión con su mejor amiga, -sí, exacto Paola-, pero no entendía por que era tan grande el problema, no entendía como el comprar una blusa igual a la de su amiga había sido el error mas grande de su vida, no entendía que tan grave podía ser tener algo igual, al contrario, le parecía hasta gracioso y especial que tuvieran los mismo gustos, por el contrario de Paola que empezó a creer que Laura quería robarle su imagen.
De nuevo Laura se sintió sin salida, corrió a aquel escalón que le brindaba una seguridad que no encontraba en ninguna otra parte de su casa y de nuevo dos pequeñas cascadas con aguas de tristeza salían de sus ojos.
No podía ser lo que estaba pasando, -¿cómo una tonta prenda de vestir pudo cambiar lo que se construyo en años?-pensaba Laura.
De nuevo un par de lindos y enormes ojos cafés salieron de la nada, junto con ellos venia un largo y húmedo pañuelo suave en forma de lengua, Canela le dio mil besos hasta que seco sus lagrimas y una enorme sonrisa salió de los labios de Laura.
Laura la abrazó, jugó con ella, la acaricio, era una niña con un juguete nuevo, a Canela le brillaban mas esos enormes ojos, estaba cansada pero no importaba por que su dueña estaba ahí, con ella y para ella. De pronto sonó el teléfono, -Laura te llaman, es Marco!- le grito su mamá; Laura bajo tan rápido como pudo las escaleras, Canela solo vio una vez mas como su dueña a la que tanto quería se alejaba.
-Les contare que Marco, era el novio de Laura, habían estado teniendo ciertos conflictos así que se habían dejado de buscar tanto, como antes-. Laura estaba tan contenta por que Marco la llamo que todo se lo olvido se concentro solo en él, Marco le pidió que hablaran al otro día por que tenia algo muy importante que decirle.
-Pero...desafortunadamente no eran buenas noticias-; llego el día Laura estaba muy contenta pues ella presentía que algo bueno pasaría ese día, y lo mas probable era que la buena noticia sería que regresaría con Marco. Pasaron 15 minutos y nada de marco; Laura estaba a punto de irse cuando apareció Marco. –¡Hola Laura no tengo mucho tiempo y solo vine a decir te que no creo que regresemos, esto se acabo!-
-¿Y que dijeron?, Laura corrió y lloró tal cual Magdalena, y de nuevo subió a su escalón, ¿no?-
-Pues no-. Laura estaba tan cansada de sentirse mal por los demás que lo primero que hizo fue darle tremenda bofetada a Marco,- si, sabemos que no fue lo mejor-, pero lo hizo por ella para desahogarse y sentirse bien, después corrió a buscar a Paola, le puso en claro por que eran amigas y que si una tonta playera iba a cambiar eso, entonces no tenia caso luchar por alguien que no ve mas haya de una tonta prenda.Laura se sentía tan bien, por primera vez pensó en ella, y en lo que ella necesitaba, fue a casa y durante todo el trayecto no dejo de sonreír. Al llegar a casa, un aprender un poco de Canela y estar para su pequeño bulto color miel corrió hacia ella, llenándola de besos, si era Canela que recibía de nuevo a su dueña como siempre, con las mismas ganas de siempre. Laura comprendió que Canela mas que ser su pequeña mascota era el ser que no importaba cuanto tiempo le dedicara, ni que humor tendría, ni los problemas que existían, siempre, siempre la iba a recibir con el mismo amor y la misma alegría, y que así como Canela esta para ella, Laura debería pequeña mascota.

***BRILLA MÁS***


Todo comenzó mientras las hadas, nogmos y duendes de Villa Encantada celebraban el eclipse lunar. Era divertido el ambiente y se respiraba un aroma de frescura y felicidad mientras todos se divertían.

Villa Encantada es ese lugar del planeta donde todo es mágico y bello; lleno de árboles, arroyos y hongos que son los lugares favoritos para habitar de estos seres místicos.

Todo iba muy bien hasta que de repente Andaluz; una de las más jóvenes hadas cayó desmayada desde casi un metro de altura, lo cual es un golpe muy fuerte para una criatura de su tamañito. Entonces sus hermanas Litza y Linju bajaron a ver como estaba pero los nogmos la levantaron cuidadosamente y la llevaron cargando al hongo mayor donde vivía el gran duende Asael; por lo cual se desplazaron hasta allá.

-Oh gran duende; Andaluz a sufrido tremendo accidente, cayo desde muy alto y a medida que pasa el tiempo su luz comienza a apagarse-Dijo Linju.
-Esto no es posible- Replico Asael –Hace mucho tiempo que no observaba semejante atrocidad.- Mientras la colocaron en una espora del hongo que utilizaban como una suave y cómoda cama.
Andaluz apenas y podía susurrar, le acercaron un poco de agua y algunos menjurjes que los nogmos prepararon; pero nada sucedía ella seguía en las mismas condiciones y lo que mas le preocupaba a Asael era que el brillo mágico de Andaluz cada vez se apagaba mas.

Atemorizadas y después de analizarlo bien Litza y Linju decidieron ir en busca de la solución de la enfermedad de Andaluz al extraño mundo de los seres humanos y aunque alguna vez ya habían convivido con algunos humanos estaban aterradas con la idea de no encontrar la forma de salvarla antes de que su brillo se apagara definitivamente, lo cual significaba su muerte.

Después de horas de vuelo y ya muy agotadas por el esfuerzo, llegaron al pueblo mas cercano de Villa Encantada muy exaltadas comenzaron sin descanso previo a buscar la solución y así comenzaron la travesía. Para comenzar entraron a un lugar lleno de adultos con unos olores muy fuertes y algunas cosas que jamás habían visto entonces decidieron hablar con una señora ya grande para ver si ella tenia idea de que pasaba en Villa Encantada; pero para su mala suerte la señora no las veía y así Litza comento – ¿Te acuerdas que cuando íbamos al cole el Prof. Verruguin algún día menciono que no teníamos que preocuparnos de que los humanos algún día quisieran cazarnos?- A lo que Linju contesto asentando con la cabeza – No – Litza; - Si recuérdalo dijo que solo nos podrían ver si creían en nosotras por lo cual tendremos que pedirle ayuda a alguien muy inocente- comento Litza así que se fueron en busca de almas limpias e inocentes y dieron con una escuela donde al verlas todos los niños se emocionaron y querían tocarlas pero ellas tenían de alguna forma especial atracción por un niño llamado Ángel al cual le costaba trabajo verlas y aparte fingía no hacerlo así que se decidieron tratar de hablar con el pues era una reacción muy fuerte la que sentían por el. Y al poco rato de seguirlo descubrieron que el se estaba encargando de romperle las ilusiones mas inocentes a sus compañeritos haciendo comentarios cono – Los Reyes Magos no existen – y cosas peores.

Después de un rato de reflexionar comprendieron que Andaluz y Ángel tenían una conexión espiritual pues ella era producto de la inocencia de Ángel pero aun no entendían porque el estaba tomando esta actitud. Por lo cual le tendieron una trampa y lograron hacer que Ángel aceptara que si las veía y dijera cual era el motivo por el que estaba tomando semejante actitud; a lo cual el contesto – No me hace caso, tiene días que la invoco pero por alguna razón no aparece- a lo cual Litza comento – Lo que sucede es que Andaluz esta enferma y esta perdiendo su magia debido a que tu no estas creyendo en ella – mientras Linju asentaba con la cabeza que eso era verdad. Los ojos de Ángel se nublaron y llenaron de lagrimas y dijo – mi intención nunca fue dañarla solo quería bromear un rato no creí que su vida dependiera de mi – a lo que Linju comento – Las hadas somos unos seres muy sensibles y ella no ha fallecido porque tu aun en el fondo crees en ella pero si se debilita por tus actos- acto seguido pidió saber como salvarla y Litza le dijo – Solo tienes q creer con el corazón en ella y su luz brillara y jamás mencionar que la magia y nosotras no existimos, solo siéntelo- En ese instante de la nada comenzaron a aparecer muchas mariposas en el cuarto de Ángel y en cuestión de segundos apareció Andaluz mas bella y radiante que nunca le dio un beso y agradeció por el acto de amor que acababa de realizar.

El descuartizador de la calle 20

Todo comenzó en un largo invierno frió como otros tantos bueno, al menos eso le parecía a Eris para quien todos los años era lo mismo ir a festejar navidad y año nuevo con sus abuelos en típica calle numero 20 en Michoacán.
- ¡Que aburrido!, pensaba cada vez que se acercaban esas fechas de felicidad para muchos, pero no son mas que tristeza para los pobres que no tienen dinero para comprar regalos ni juguetes para sus hijos.
En el camino a casa de sus abuelos comenzaban a pasar cosas extrañas había mucha gente rodeando un camino.
Los papas de Eris se bajaron del carro sin poder hacer otra cosa más que mirar lo que sucedía ahí.
¡OH! Sorpresa que se llevaron era un cuerpo degollado y sin dedos en la mano totalmente descuartizado por que las manos las mantenía pero la cabeza, y de la cintura para abajo estaba totalmente esparcido en la carretera, el cuerpo irreconocible para muchos era una asquerosidad mientras los medios de comunicación hacían su trabajo.
Eris bajo a percatarse que sucedía.
-- ¡Que asco! Quien pudo hacer esto se decía a sí misma.

Después de un largo día por fin llegaron a casa de sus abuelos estaban ahí todos sus primos y los tíos claro.

Fue a saludar a Carlos, uno de sus primos con quien se llevaba mejor que con los demás, el vivía con sus abuelos pues sus padres lo habían abandonado al cumplir 3 años.
Eris y Carlos salieron a hacer sus compras respectivas y de repente escucharon como un carro boto un cadáver totalmente descuartizado, en la cabeza tenia un símbolo de la anarquía.

Vaya semana, un cadáver por día y totalmente descuartizado,
- ¿Hasta cuando dejara de pasar esto?, se preguntaban todos.
Eris decidió ponerle fin a todo y buscar al descuartizador.

Por la calle de sus abuelos había una casa solitaria y hacia mucho que nadie la ocupaba aparte de que no había mucha gente que quisiera rentarla o comprarla por que decían que estaba embrujada.

Eris y Carlos estando afuera jugando básquetbol vieron entrar a un hombre a esa casa solitaria y decidieron ir a espiarlo, entraron por una ventana de la casa, se comenzaron a infiltrar entre los cuartos, llegando a un sótano vieron riñones, corazones, hígados, tripas en frascos. A un lado del sótano había otro cuarto donde estaban tres personas amarradas y su captor estaba sentado leyéndoles una novela.

--¡Que patético!, pensaban Eris y Carlos que tenían que sacar a esas personas, pero en eso Carlos tropezó y el descuartizador escucho sus pasos, sin mas lo atrapo y lo amarro, solo Eris logro salir .

Fue corriendo con sus padres a contarles todo pero nadie le creía pues siempre hacían ese tipo de bromas para divertirse.

Ana Karina Martínez López
Ella tenia que hacer algo, salio corriendo a ver si podía rescatar a Carlos por una ventana miro que el descuartizador salía pero eso no era su mayor sorpresa lo peor era que Carlos estaba muerto, justamente en ese instante le estaba cortando sus piernas cuando ella que do en shock.

Fue directo con sus padres a volverles a contar lo nuevo y trágico que le había pasado a su primo Carlos, al ver su reacción salieron corriendo y llamaron a la policía.

Cuando la policía llego a verificar todo, no encontraron al descuartizador de la calle 20 solo estaban los múltiples cadáveres y él se había dado a la fuga.
Por más que trataron de rastrearlo no encontraron a nadie y nunca mas se supo de el.

Ese fue un invierno muy diferente, ¡vaya frió…!

lunes, 19 de mayo de 2008

La princesita del Perú

Esta es una historia real…

Primer día del mes de Septiembre de 1997. Eran cerca de las tres de la tarde en la hermosa ciudad de Lima, Perú. Ocho meses y medio habían ya transcurrido desde que Enrique Quispe y su esposa Miranda, habían recibido la terrible noticia sobre la concepción de su primer hijo; y digo terrible porque siendo una pareja que vivía en el barrio de Zepita, detrás del convento de Santa Catalina, no tenían mucho que ofrecer. Los dos eran iletrados y se habían casado por decisión de sus padres a los 16 años de edad, cuando ninguno de ellos olfateaba si quiera la dimensión del compromiso que estaban adquiriendo.

Miranda era una muchacha muy pobre, debilucha y constantemente enfermaba. Nunca aprendió otra cosa que no fuera a hacer las labores del hogar y, como buena ama de casa que era, diariamente cocinaba el tradicional ají de gallina que tanto gustaba a su esposo, a quien, después de algunos meses de casada, aprendió a amar, respetar y honrar hasta el último día de su vida.

Tres de la tarde; la voz alarmada del reportero de de la RPP sonaba en el radio del señor Cusco, quien los hospedaba y alimentaba por ser buen amigo de la familia:
“Esta imagen muestra a la Lady Di volteada y mirando a los paparazzi poco antes de que el vehículo se estrellara contra el pilar de un túnel en París. Según el millonario Mohamed Al Fayed, su hijo y Diana fueron víctimas de un complot de los servicios secretos británicos orquestado por Felipe de Edimburgo, para evitar que Dodi se casara con la joven princesa…”

Mientras la partera entraba y salía del cuarto con paños y paños de tela empapados en sangre, Enrique escuchaba atentamente la terrible noticia tratando de distraer su mente en otras cosas.
El miedo a perder a Miranda y a no saber qué haría después con un hijo suyo, le había traído tantas noches de insomnio, que durante varios días se quedó dormido sin quererlo sobre la podadora de pasto en alguno de los preciosos jardines de la residencia de Don Garcilaso de la Vega, importante funcionario público del Perú.

Por supuesto que Enrique no tenía idea de quién era la Princesa Diana y mucho menos sabía dónde diablos se encontraba ubicado Gales; “¡La calle Ugarte, será! Porque a mí Gales, ni mi suena”, pensaba angustiado y nervioso por no tener noticia alguna de Miranda, “Además, ¿pa´ qué andan armando tanto alboroto por un choque?, ¿pos que no se estrellan carros to´os los días en las calles?”.

De pronto, los gritos y alaridos que provenían del cuarto cesaron por completo y unos segundos después, fueron sustituidos por un llanto bajito y tierno; la partera tardó todavía algunos minutos más en salir y entregó un bulto de sábanas blancas que se movía con timidez e inocencia, a los brazos de Enrique.

Durante los días siguientes, la partera continuó visitando la casa del señor Cusco para revisar a la pequeña y en el marco de la puerta, al momento justo antes de partir, volteaba y hacía la pregunta de la que Enrique tanto huía: “Debes bautizar a la niña, ¿ya tienes el nombre?”.

“Un nombre, ¿qué tan difícil puede ser?”, pensaba silenciosamente por las noches. Debía ser un nombre fuerte, en honor a Miranda, pero que no fuese el suyo propio ya que sería insoportable; tampoco quería ponerle un nombre común o el del patrono del día pues lo único que recordaba del primero de septiembre era la muerte de su esposa y de la princesa esa… “¡¡La princesa!! ¡Eso es! ¡Mi hija será una princesa!”.

Los años transcurrieron mucho más tranquilamente de lo que Enrique pensaba. Su hija le hacía muy buena compañía pues con su humor y sonrisa alegraban los largos días de trabajo en el jardín. Pero llegó el turno de comenzar la escuela, pues él no quería que su hija tuviera el mismo destino que sus padres y, después de mucho discutir con ella la despertó el lunes muy tempranito y la acompañó de la mano hasta la puerta del colegio. Pasaron por el jardín Libertad, la nevería, la tienda de artefactos para el hogar, la cárcel en donde todavía se encontraba encerrado su hermano por robo a mano armada y después de mucho caminar, llegaron.

“Escuela Primaria Libro de Texto Gratuito”, se leía en letras de fierro; entraron temerosos sin saber hacia dónde ir. Unos segundos después se apareció frente ellos la que se presentó como: “Directora Magaña” y, empujando a la niña por la espalda, la condujo a su salón de clases sin despedirse de su padre.

Había llegado tarde, así que cuando el horroroso rechinido de la puerta se oyó, todos sus nuevos compañeros voltearon a verla y el profesor, con el gis todavía en la mano, le ordenó buscar lugar en las filas, no sin antes decir: “¡Preséntate ante la clase niña!”.

Este era el momento y el lugar para que los demás la conocieran, para que pudiera hacer amigos rápidamente y la pesadilla del primer día de clases acabara. Así que tomó aire, sonrió y con una tímida voz contestó: “Soy una princesa de un lugar muy lejano, mi nombre es Leididi”.
Por: Marianne Gómez

LOS ALQUIMISTAS

Aldo Mancilla Álvarez
Los Alquimistas
Todo comienza en un lugar de nombre Soma donde se dice que vivían dos hermanos de nombre Alfons y Eduard, pero el hermano menor que es Eduard sufría de una deformidad en su cuerpo debido a un descuido de su madre. Estos hermanos se dedicaban a lograr la alquimia hacia los objetos, convertían todo lo que podían en oro o puedian hacer la reconstrucción de algunas cosas ya sean rotas o en mal estado, a eso es a lo que se dedicaban los dos hermanos.
Alfons, el hermano mas grande siempre tenia ideas muy atrevidas, entre una de sus ideas estaba hacer un cambio físico al cuerpo de su hermano, para que pudiera ser y actuar como una persona normal, pero para los hermanos sus conocimientos siempre eran los mismos, por los libros que siempre leían, ya se sabían todo sobre sus libros, entonces decidieron ir en busaca de su abuelo; quien su madre les contó que fue uno de los mejores alquimistas de todos los tiempos, pero el problema era de que no sabían donde estaba su abuelo por que muchas personas le tenían envidia por ser tan bueno.
Fueron en busca de el Abuelo de nombre Albert, tenían mas o menos una idea de donde se podría encontrar, en una villa, muy alejada y a lado de un rió, pero no tenían idea del nombre y la ubicación, entonces es cuando empiezan sus aventuras mientras buscan al abuelo.
Llegaron a un pueblo llamado Tempestad, y empezaron a preguntar por el abuelo Albert, pero estando ahí se alojaron en una casa de huéspedes, donde fueron muy bien recibidos, por el apellido que identificaba al abuelo, Stanford; el problema era que todos sabían que el abuelo Albert, era el alquimista mas conocido del mundo, pero no lo conocían en persona, ya que tenia un enemigo que quería deshacerse de el. Solo sabían que vivía en una villa llamada Gearem al sur del mundo.
Llegar al abuelo les iba a costar mucho, ya que estaban del otro lado de la villa, pero no se rindieron con tal de que Eduard se compusiera, mientras estaban en ese pueblo, se les presento la oportunidad de poder ayudar a personas que no tenían nada de recursos, convirtiendo algunos objetos en oro, para que pudieran comprar comida, y lo que les hiciera falta, a otra familia les hicieron el milagro de arreglar la piel de su hijita que se había quemado en un accidente. Y así pasaron varias experiencias, ayudando a las personas que lo necesitaban.
Cuando se fueron de ese pueblo, viajaron y viajaron hasta llegar al sur de la ciudad, donde se alojaron en otra casa de huéspedes, y donde les dieron un poco más de información sobre el abuelo, solo se quedaron dos días ahí, donde también pudieron ayudar a más personas. Ahí les dijeron que el abuelo se encontraba en el bosque de los Inacres en la aldea de Gearem, podían encontrarlo si se iban por un camino largo pero seguro, que quedaba del lado oeste de la aldea, por que el lado este era corto pero peligroso.
Al otro día, emprendieron su camino, por que les urgía llegar a ver al abuelo para que su hermano se compusiera. Estando a la entrada del bosque, Eduad encontró un señor anciano al que le preguntaron por su abuelo pero el señor no podía entender lo que le decían pero al oír el apellido de su abuelo enseguida le dijo donde se encontraba y fueron en busca de el abuelo el anciano les dijo que se encontraba en lo alto de una montaña haciendo una reconstrucción a una persona pero lo cual era muy peligrosa hasta podría llegar a morir su abuelo entonces corrieron hacia la sima de la montaña y llegando hasta la sima encontraron a tres persona un era un joven otra era un joven y la tercera era un anciano entonces al llegar gritaron el nombre de su abuelo Albert entonces el anciano volteo de manera rápida y el anciano pregunto que quines eran entonces eduard contesto tu eres albert contesta si o no entonces el anciano dijo que si pero pregunto como saben mi nombre y eduard contesto que eran sus nietos entonces el abuelo dejo ala joven a la que le estaba haciéndole una reconstrucción y corrió hacia eduard y alfons y le empezó a hacer preguntas como ¿Quien su madre y padre? ¿Cuantos años tienen? ¿En donde viven? Y alfons fue el que contesto todo por que eduard quedo asombrado al ver al abuelo por que tenia un presentimiento de que el era su abuelo por el físico que tenia se parecía al de su padre eran muy parecidos, entonces el abuelo se quedo sorprendido de que sus nietos lo hayan encontraran y les pregunto que para que habían llegado hasta donde estaba el y les dijeron que querian hacer una reconstrucción a eduard entonces el abuelo se los llevo a su casa en donde empezó a ver sus habilidades para hacer la reconstrucción de su hermano y el abuelo se dio cuenta de que eran muy buenos para la reconstrucción pero si les fallaban algunas puntos pero no muy importantes

Entonces empezaron a trabajar en la reconstrucción poco a poco lo fueron reconstruyendo pero al llegar a su pierna la mas afectada vieron que había un problema por que su pierna ya estaba muy lastimada y entonces comenzaron trabajar mas duro eduar y alfons aplicaron cosas que les enseño su madre y su padre y así fue como pusieron reconstruir su pierna
POR:ALDO

Apariencias


Apariencias

Hace muchos años en un pueblito cerca del estado de Hidalgo se rumoraba entre la población que en esos rumbos se paseaba por las noches el alma de una niña, los habitantes del lugar aseguraban haberla escuchado:
-¡Ayúdame mami! ¡Ayuda!
Pero como en esos tiempos el pueblito era muy pequeño todos se conocían y compartían experiencias que aseguraban haber tenido acerca del tema ya que esto era la platica que se entablaba todos los días, hasta que un buen día la llegada de un grupo de jóvenes maestros, 3 hombres y 2 mujeres, entusiasmados por realizar sus practicas profesionales, se convirtieron rápidamente en el centro de atención del pueblo entero, ya que ellos no creían en las apariciones y por lo cual habían elegido ese pueblito para realizar sus practicas profesionales y demostrarles a todos que no existían esos fenómenos sobrenaturales, que no había nada de que preocuparse que todo lo que pasaba tenia una explicación lógica, estaban dispuestos a demostrarles a todos los lugareños que los gritos de la niña no eran reales y que solo eran mentiras que inventaba la gente para llamar la atención, o bien, que solo eran cuentos que inventaban los adultos para que los niños se durmieran temprano y se portaran bien. Con la llegada de los profesores al pueblo, las cosas se fueron poniendo cada día peor; se alojaron en la casa de una anciana que vivía sola la cual les había ofrecido posada para que se pudieran hospedar ahí durante su estancia en el pueblo.
La casa contaba con dos habitaciones las cuales estaban separadas por un corredor muy largo, así que los 3 docentes varones ocuparon la habitación mas grande; en el cuarto continuo, se alojaron: la anciana y las dos muchachas, la casa era una especie de hacienda, vieja, llena de telarañas y polvo, con muebles viejos y rústicos, y para cerrar con broche de oro no contaba con electricidad alumbrándose solo con pequeños candiles, por lo cual era sumamente difícil vagar por la vieja casona, los maestros comenzaron a asustarse, ya que llegada la noche, el pueblo era cubierto por un gran manto negro el cual no les permitía ver mas haya de sus propias narices y eso les provocaba un sentimiento de temor al caminar solos por el pueblecillo, siendo esto solo el principio de todos los sucesos que les ocurrirían a los jóvenes durante su primer noche en el pueblo, pudiendo así asegurar que esa noche fue la mas larga de toda su vida, ya que el frió, los ruidos extraños dentro de casona, los perros ladrando y el silbido del viento que azotaba los ventanales eran tan estridentes y aterradores que hasta el mismo diablo tendría miedo de vivir ahí.
Así pasaron 5 noches, cada una de ellas con sus respectivos días, hasta que la sexta noche sucedió algo aterrador.
Todo comenzó cuando los maestros se dispusieron a tomar una merienda preparada por la dulce y adorable ancianita, para así retirarse a dormir, cuando el reloj anunciaba la media noche, un silencio aterrador cubrió las calles de pueblito e instantes mas tarde se comenzó a escuchar aquel lamento tan espeluznante, que era imposible no escucharlo, era verdad todo lo que se decía acerca de los gritos de aquella niña, en ese momento los maestros tomaron una decisión muy importante, decidieron investigar el pasado de aquella niña y la forma en la cual había muerto.
Así comenzaron su investigación, empezando con una junta entre los lugareños.
Como era de esperarse casi nadie acudió a la junta, los profesores no podían entender el porque del rechazo tan grande que había hacia ellos, hasta que un día le preguntaron a la anciana la causa de este suceso, y ella muy educadamente les respondió que lo que pasaba es que los habitantes del lugar tenían miedo de que si hacían algo que perturbara al espíritu, después la niña se vengaría de ellos con lo que mas querían, ya que hace tiempo también habían venido unos científicos a estudiar los sucesos paranormales ocurridos en aquel lugar, averiguando demasiadas cosas acerca de la niña, obviamente ayudados por los pobladores del lugar y de la nada, los científicos desaparecieron, una noche se fueron a acostar y a la mañana siguiente ellos ya no estaban, a decir verdad no había quedado ni rastro alguno de ellos y a los habitantes que les habían ayudado, empezaron a ocurrirles una serie de sucesos de lo mas extraños por lo cual los pueblerinos preferían evitar el tema y no investigar mas acerca del espíritu ya que esto lo enojaba profundamente.
El mas joven de los profesores asustado por la advertencia de la anciana les dijo a sus compañeros que lo mejor seria hacer caso a la advertencia que les habían dado los habitantes del lugar y dejaran todo por la paz que se dedicaran específicamente a sus practicas y se fueran lo mas rápido posible de ahí. Pero una de sus compañeras ya estaba demasiado metida en el tema y le dijo que ella no se iría de ahí sin antes haber averiguado lo que realmente ocurrió en aquel lugar en el pasado.
Y así los profesores empezaron a averiguar aunque no sabían mucho ya que los lugareños no les decían casi nada solo lo que les escapaba por un descuido, hasta el momento sabían que había sido una niña hija de un lugarteniente dueño de mas de la mitad del pueblo ella había llegado ahí a los 5 años mas o menos con sus padres eso era lo único que sabían de ella.
Una noche antes de acostarse la muchacha mas joven y también la mas curiosa de las dos se perdió en la enorme hacienda encontrando así un cuarto al cual nunca había entrado ella obviamente no se iba a quedar con la duda y entro en el cuarto habían un montón de cosas se parecía a la habitación de una niña de no mas de 7 años la joven empezó a curiosear y a ver todo lo que se le cruzaba al final encontró un viejo álbum fotográfico el cual estaba totalmente lleno en el había una historia plasmada con puras fotografías de una familia, eran el papá, la mamá y una pequeña niña la niña era muy bonita de una sonrisa igual a la de un ángel, dueña de unos ojos encantadores y de un azul claro hechizante, su cabello era rubio y rizado de tez blanca perlada y a pesar del tiempo que evidentemente tenia la foto la piel de la niña era realmente hermosa, la figura, materna que estaba parada a su lado derecho era también muy guapa la niña era como una copia de ella solo que en pequeño aunque su madre se veía un poco enferma pero esto no le quitaba ni un poco su belleza, su padre era imponente y tenia ojeras a causa del trabajo supuso la mujer, el álbum estaba lleno de fotos de la familia, de la niña sola, de la niña con una mujer……la mujer se le hizo muy conocida a la chava pero como no la reconoció de inmediato no le dio importancia y termino de ver el álbum. La muchacha se absorbió tanto en el álbum que no se percato que pronto amanecería así que decidió llevarse el álbum a su cuarto y terminar de verlo mas tarde.
A la mañana siguiente la muchacha bajo a desayunar muy quitada de la pena y les contó a sus compañeros lo que había encontrado todos se mostraron muy interesados pero nadie mas que la anciana dueña de la casona primero puso cara de susto y después una expresión extraña pero terrorífica curso su rostro y por segundos se vio igual que una persona desquiciada aunque de inmediato cambio su expresión y no quedo ni rastro de la pasada, los profesores no le dieron importancia a lo sucedido y siguieron con su día normal, en la tarde al llegar a la casa la anciana se hallaba en el cuarto de la muchacha con el álbum abierto entre sus manos, cuando la joven entro y la vio ahí le pregunto si se le ofrecía algo al principio la viejita no le respondió pero al final la volteo a ver con cara de poseída y empezó a hablar con una voz que definitivamente no era la suya.
- recuerdo el día en que llego Catherine al pueblo, su familia fue la sensación y el tema favorito de todas las mujeres y hombres del lugar, decían de todo acerca de ella pero lo que no sabían es que ella era una niña realmente tierna y muy dulce un verdadero ángel el único problema que tenia era su padre un trabajador compulsivo que nunca tenia tiempo ni para ella ni para su madre enferma, pobre niña su madre murió poco tiempo después de haber llegado al pueblo y ella se quedo completamente sola ya que su padre con trabajos y conocía su nombre…..mi niña, mi Catherine, mi dulce angelito…….sufrió tanto mi chiquita yo la quería como si fuera mi hija y ella hasta mami me decía, pero tenia que llegar ese maldito caballo, ese caballo asesino al cual ella se encapricho tanto uno de los únicos regalos que su padre le hizo tal ves por eso lo quería tanto al endemoniado animal cabalgaba noche y día en el claro siempre con la supervisión de su padre. Maldita sea la hora en que su padre no pudo acompañarla aquel día ella, era solo una niña de 11 años, no sabia ni subirse al caballo sola, y mucho menos asegurarse y andar por el pueblo completamente desprotegida, el caballo, un maldito animal miedoso se asusto y tiro a mi niña de su lomo ella callo pero como no se aseguro bien una de sus piernitas se quedo enredada en las cuerdas de la silla del caballo pobrecita de mi niña como sufrió al ser arrastrada por todo el pueblo sujeta al caballo y gritándome pidiéndome ayuda pero yo no m hallaba cerca ho dios nunca me lo perdonare hasta que por fin su calvario termino golpeándose en la cabeza y soltándose por fin del animal quedando su pequeño cadáver en la callejuela principal del pueblo la encontraron poco tiempo después su hermoso cuerpecito estaba destrozado OH pobre de mi niña, pobre de mi ángel y ahora las malas lenguas andan diciendo por ahí que ella anda vagando por esa horrenda calle deberían dejarla en paz-
La anciana termino, se hecho a llorar y cubriendose las manos salio de la habitación, la joven se quedo paralizada sin saber que hacer, decir o como actuar corrió hasta el cuarto de sus compañeros y les contó lo sucedido y como es lógico tomaron una decisión una mala decisión pero al fin y al cabo una decisión……..fueron a ver la calle de la que la anciana había hablado
Al llegar ya era de noche entraron a la calle y vieron al vació que les brindaba la oscuridad total y cegadora a lo lejos solo se podía ver un par de puntitos, un par de minúsculos puntitos color azul claro que los observaban desde lejos, y de la nada se empezaron a acercar convirtiéndose así en un par de ojos y al final lograron ver a una pequeña de 11 años mas o menos ella los vio sonrió macabramente y emitió el tan conocido grito
- ¡AYUDAME MAMI AYUDA!
Y así como llego desapareció los jóvenes se quedaron paralizados y después de unos minutos como si todos hubieran tenido la misma idea corrieron a la casa al llegar a ella todos coincidieron que a la mañana siguiente se irían de ahí.
Se fueron a acostar temerosos tanto que ni se percataron de la ausencia de la anciana lo que ellos no sabían es que ya no habría mañana siguiente para ellos.
Al amanecer los jóvenes habían desaparecido como los anteriores con la pequeña diferencia que esta ves solo lograron encontrar su equipaje ya listo para marcharse.
Por: Cinthia Anaid Jimenez *AnY*

sábado, 17 de mayo de 2008

Cuento


Mi amor de ensueño.

Por: Abril Bautista Peralta


Era tan tarde que no podía contener el sueño así que decidí ir a la cama ya que al día siguiente tendría muchas cosas que hacer en la escuela.

Ya en la escuela todo comenzó como un día cualquiera, un día tan normal como cualquier otro, pasear con los amigos, estudiar, en fin... tan típico que jamás imagine que mi vida cambiaria.

De pronto mi mirada se centro en un punto fijo, se había detenido en aquel hombre tan misterioso, alto, con el cabello negro y unos ojos verdes hipnotizantes; que era inaudito que mis ojos lo miraran precisamente a el. En el fondo simplemente oía voces murmurando pero todos mis sentidos estaban pasmados, mi corazón se había detenido al igual que el tiempo.

Vi su silueta acercarse hacia mi, lo cual hacia que mi pequeño y delgado cuerpo se pusiera inerte, cuando de pronto una voz familiar me hablo, la escuchaba tan lejana que tarde unos segundos en identificarla, era mi amiga Lina, que me decía –Despierta, en que diablos piensas-, -Mira te presento a un amigo…Joaquín, ella es Ariadna, Ariadna… él es Joaquín-.

No podía creer que tenia frente a mí a ese ser que por varios minutos había contemplado sin sentido.

Solo puedo recordar de aquel momento el simple -hola- y el beso en la mejilla que me dio, en realidad creo que de ahí me enamore… fue amor a primera vista.

En fin a partir de ahí mi vida cambio todo se había vuelto diferente, mi corazón había encontrado el amor.

Para ser sinceros no se cuanto tiempo paso para mi fueron tal vez meses, aunque probablemente pudieron haber sido días; pero las platicas con Joaquín se hicieron más comunes, más agradables mas nuestras.

Yo no se si sentía lo mismo por mi, pero parecía disfrutar los minutos que pasábamos juntos, podría decirse que en poco tiempo nos convertíamos en los mejores amigos.

Así paso el tiempo, el me contaba sus confidencias y yo las mías; hasta que llego el día en que me dijo algo que hubiera preferido no escuchar:
-Aris, necesito contarte algo- me decía clavando fijamente esos ojos verdes tan maravillosos en mi.
-¿Qué pasa te noto raro? ¿Estás bien?- conteste.
-No en realidad, no…- me dijo con una expresión que en realidad nunca había visto en su cara; -Me enamore-.

En ese instante tuve que contener las lágrimas que casi salían de mis ojos.

Continúo diciéndome que no podía quedarse en la ciudad aunque el amor de su vida viviera aquí, tenía que irse porque su papá tenía un nuevo trabajo y tenía que estar con su familia.

Yo estaba confundida e intrigada, en pocos minutos un conflicto de emociones me invadió y, entre lagrimas no supe que hacer, más que abrazarlo y decirle al oído –Te amo- , le había revelado el secreto que durante mucho tiempo había guardado en mi, para no perder su amistad, pero ahora no volvería a verlo era lo menos que necesitaba mi corazón para poder desahogarse.

El, al escuchar mis palabras me abrazo fuertemente y me susurro algo que no imagine:
-Yo también, solo que no quería perder tu amistad, pero ahora debo decirte adiós por siempre-.

En ese instante me tomo de las manos, se acerco a mi dándome un beso en los labios. Ese instante el reloj se detuvo y no supe que hacer más que quedar impactada.

Nos quedamos por un momento mirándonos a los ojos, hasta que se levanto y rosando mi mejilla con su mano, me dijo Adiós; marchándose sin mirar atrás.

Yo no sabía si correr tras él o liberar la frustración de verlo partir en un grito, pero al verlo irse no pude moverme solo sentía las lagrimas en mi rostro que no podían contenerse.

De pronto escuche un ruido ensordecedor, como un zumbido extraño. Entonces, desperté todo había sido simplemente un sueño, pero todo había sido tan real que no me lo podía explicar, permanecí en shock por unos minutos, hasta que mire el reloj y vi que era demasiado tarde; tenía que llegar a la escuela.

Ya ahí encontré a mi amiga Lina como todos los días, le conté que había tenido un sueño extraño; pero no quise entrar en detalles, cuando de pronto alguien se acerco y escuche a Lina diciéndome:
-Joaquín, te presento a Ariadna-.
-Ariadna, te presento a Joaquín…-

El sueño se volvió realidad más pronto de lo que pensé…

viernes, 16 de mayo de 2008

En BuScA dEl AmOr

Eran las seis de la mañana y Jayme escuchó que un lindo canario, se paro a la orilla de su ventana y comenzó a silbar, Jayme escuchaba el canto, mientras estaba recostada bajo las cobijas, e imaginando si alguna vez podría conocer al hombre de sus sueños, y si podría ir a la ciudad a estudiar como ella siempre lo había soñado. Ella vivía en una villa llamada Gearem a la orilla de un río, donde la naturaleza era muy bella, se podía admirar por sus colores, su olor, y su encanto.
Jayme tenía muchas ganas de levantarse para desayunar y después ir al río donde más tarde se encontraría con su mejor amigo Patric. Esa tarde era muy especial para Jaymie, pero a la vez triste, ya que estaba convencida de que aquel paseo iba a ser inolvidable, por que estaba decidida a divertirse, ya que se iba a ir a un largo viaje a la ciudad, para poder estudiar.
Estuvieron paseando por el bosque, nadaron un rato en el rió, como solían hacerlo todas las mañanas, platicaron por un buen rato, entre platica y platica ¨Patric le decía que la iba a extrañar mucho, y que algún día la iría a visitar y tal vez se quedaría por allá para estudiar también,
Llegando el atardecer Patric invito a comer a Jayme a su casa, donde la esperaban la familia de el, la de Jaymie, y algunos amigos para despedirla con una pequeña fiesta. Después de estar conviviendo un rato, Jayme regreso a casa junto con su mamá y su hermana Dafne, ya que su papá había muerto en un accidente cuando ella y su hermana eran pequeñas.
Al llegar el día en el que Jayime partía a la ciudad, la fueron a despedir Patric, su hermana Dafne y su mamá.
Patric le dio un regalo muy especial, era un collar con el que representaban la amistad que llevaban por años, y para que nunca lo olvidara, así mismo; ella también le hizo un collar con el mismo significado, y prometieron nunca quitárselo al menos hasta que se vuelvan a ver.
Llegando Jayme a la ciudad se alojo en la pequeña casa que ella y su mamá compraron un tiempo antes, al principio se sentía sola porque no conocía a nadie en la ciudad, extrañaba el sonido del río, de los pájaros, el olor de la naturaleza pero con el paso del tiempo, en la escuela fue conociendo a mucha gente, también en el lugar donde vivía, porque ella era muy amigable, y se le hacia fácil hacer amigos, a lo largo de 2 años, conoció a un muchacho llamado Ben, con quien creyó que iba a tener una relación de pareja como siempre lo había soñado, al principio se llevaban muy bien, pero Jayme se acordaba mucho de Patric, hablaban por teléfono, se escribían e-mails y lo extrañaba mucho.
Cuando pensaba en Patric, se confundía mucho ya que lo extrañaba demasiado, sentía ganas de abrazarlo, tocarlo, verlo por lo menos, y llego a pensar que lo amaba, pero después de tanto estar pensando en Patric, se daba cuenta que estaba mal por que su novio era Ben, y no podía traicionarlo de esa manera, después de que Ben le brindo su apoyo, confianza, amistad y mas que nada amor, ella no aceptaba, no quería darse cuenta de lo que en verdad sentía por Patric, y como no quería traicionar a Ben, dejo de hablar con Patric, los e-mails ya eran menos, y no le daba explicación a Patric. Por otra parte le pasaba lo mismo a Patric, se dio cuenta de que amaba a Jayme, y no podía vivir sin ella.
Patric preocupado por la indiferencia de Jayme, decide ir a buscarla a la ciudad, solo espero terminar su carrera, y fue a seguirla.
Llego un Lunes por la tarde y lo primero que hizo fue buscar a Jayme a su escuela, después de haber ido a hospedarse en un hotel.
Jayme por supuesto que no se lo esperaba salio normal, de la escuela con Ben, y para despedirse Ben le dio un beso a Jayme, en ese momento Patric se da cuenta de lo que esta pasando y se sintió triste, pero no se rindió, y fue hacia Jayme, ella sorprendida corre a abrazarlo y no aguanto las ganas de llorar, Ben no entendía nada porque Jayme nunca le había contado de Patric, al explicarle un poco de todo Ben entendió y dejo que platicaran a solas.
Jayme y Patric platicaron por mucho tiempo mientras caminaban hacia un parque donde ella se acordaba de el, ya que era como si estuvieran en aquella villa donde vivían, el no le dijo nada sobre sus sentimientos, porque vio que Jayme ya tenia novio, decidió pasar así unos días, conviviendo con Ben y Jayme, pero al estar abrazados o besándose Jayme y Ben el no lo podía aguantar mejor se iba a otro lado.
Después de un tiempo Ben se dio cuenta de que ellos se amaban, es solo que Patric no le decía nada a Jayme por Ben, por que el creía que de verdad lo amaba, y Jayme también lo amaba por sus acciones, sus miradas, y demás.
Ben decidió hacerse a un lado para que Jayme y Patric pudieran amarse y ser felices, como ella lo deseaba.
Ellos le agradecieron su lealtad, honestidad y gran valor y decidieron realizar lo que tanto habían buscado sin saber lo cerca que estaban de encontrarlo, y así Jayme encontró el amor que siempre había soñado.


Korny
por: Alejandra L. Rodríguez Mtz.

jueves, 15 de mayo de 2008

Cuento Fernanda Gordillo

La Casa Embrujada

Hace unos años en un pueblo muy lejano todo era tranquilidad y paz, sus habitantes se dedicaban a trabajar y no había problemas entre ellos; de hecho se ayudaban entre todos para poder salir adelante y todos eran tratados por igual, todos excepto uno.
En realidad nadie lo ha visto, de hecho muchos creen que no existe, pero yo estoy seguro que lo vi.
Todo ocurrió hace unos dos días, cuando como de costumbre desde muy temprano me fui a trabajar con Don Pepe, el dueño de la panadería del pueblo. Puedo recordar que ese día estaba haciendo tanto frío; había mucha neblina, era una bruma muy intensa. Por lo regular trato de no pasar por esa casa ya que es la mas fea, parece como si la hubiesen sacado de un cuento de terror y la verdad he de confesarlo, me aterra pasar por ahí; me han contado muchas historias, sean ciertas o no, no lo sé y la verdad no tengo muchas ganas de descubrirlo; pero ese día fue la excepción, no sé que paso, para empezar el día estaba horrible y aunque no queriendo me tuve que desviar y pasar por esa enorme, fea y tétrica casa. Justo al pasar por la puerta se escuchó un rechinido muy feo y la enorme puerta negra se abrió, un humo blanco y un olor a viejo fue lo que salió de esa puerta.
Yo, me encontraba aterrado, no sabía si echarme a correr o aguantarme, tomar valor y entrar. Pasaron unos dos minutos cuando me decidí a entrar; las piernas me temblaban y andaba sudando muchísimo, estaba muy nervioso por no saber lo que me esperaba y todo ¡por curioso!
Al entrar lo primero que vi fueron unas enormes escaleras, en el techo había un candelabro enorme, como esos que están en las casas viejas y antiguas; todo estaba lleno de polvo pero en realidad la casa era muy hermosa. No podía entender como una casa tan bonita podía estar tan descuidada y me puse a pensar todo lo que le haría a esa casa si fuera mía. Estaba tan entretenido que se me olvido que estaba en la “casa embrujada”; como todos la nombraban, el miedo se me había quitado; comencé a ver unas fotos que se encontraban sobre un piano enorme y justo cuando tome la de una mujer muy bella se escuchó el rechinido del viejo piso de madera, como si alguien se acercara mas y más hacia mí.
Inmediatamente me regresó el miedo, comencé a sudar otra vez y fue cuando lo vi; era un hombre ya grande, postrado en una silla de ruedas, se me quedó viendo y poco a poco se fue acercando hacía mí; prácticamente me quedé inmóvil, él me arrebató la foto de la joven que tenía en la mano y me dijo: - ¿Qué es lo que haces aquí?, ¿Cómo entraste?
A lo que contesté con voz entrecortada y tartamudeando: - Iba hacia mi trabajo y justo cuando pase se abrió la puerta y….
- Y te dio curiosidad por entrar, ¿cierto?
- Pues si, un poco, la verdad es que si lo pensé mucho porque me daba miedo. Le contesté.
- Si, me imagino. Esta gente se la pasa hablando de mí, diciendo cosas que no son ciertas. Tú no les crees, ¿verdad?
- Pues… antes de venir aquí tal vez si, un poco; pero ya viéndolo bien no se ve tan malo como dicen.
- ¿Tanto así?.... Se ve que eres un niño muy inteligente y trabajador. ¿Cuál es tu nombre?
- Me llamo Pablo y gracias por lo de inteligente y trabajador pero, no es para tanto.
- Muy bien Pablo, vamos a la cocina, te invito un vaso de leche caliente.
Nos dirigimos hacia la cocina y nos sentamos a platicar un largo rato, la verdad es que Don Ricardo no es tan malo como dicen todos en el pueblo. Si, se volvió un poco amargadito el día en que perdió al amor de su vida (la joven mujer de foto que estaba observando sobre el piano). Me contó que cuando ella murió, se encerró en su casa, con todos sus recuerdos y su dolor; y durante años a estado en completo aislamiento, sin hablar ni convivir con nadie hasta el día en el que por curioso yo entre a su casa.
Me dijo que estaba muy contento de haberme conocido y que esperaba que lo fuera a visitar cuando quisiera para poder platicar y que no se sintiera tan solo, me pidió que fuéramos amigos pero que eso si, que no le contara a nadie sobre él, pues no quería que lo vieran con lastima y que a mí no me dejaran visitarlo más.
Salí de la casa de Don Ricardo como a medio día, pues habíamos platicado tanto que el tiempo se me había ido volando; para cuando salí la neblina se había esfumado y yo tuve que correr para llegar a mi trabajo donde Don Pepe ya me estaba esperando pues pensaba que algo me había pasado. Yo, no acostumbro a mentir pero ahora Don Ricardo era mi amigo y tenía que echar unas mentirillas para cubrirlo pues lo tuve que hacer.
Hasta el momento nadie me ha descubierto, todas las mañanas paso a la “casa embrujada” de Don Ricardo a desayunar, platicamos un rato y le ayudo con algunas cosas pesadas de su casa, pues está grande y no puede caminar. Disfruto mucho pasar tiempo con Don Ricardo pues me cuenta anécdotas y muchas historias divertidas.
Puedo decir que no me arrepiento de haber entrado a esa casa el día en que había esa neblina espantosa pues encontré a mi mejor amigo: Don Ricardo.
En el pueblo se sigue hablando de la famosa casa embrujada y del hombre que la habita, yo solo me hago el desentendido y finjo mucho temor al hablar de ella. Sigo con mi trabajo en la panadería y mi vida es igual a la de antes solo que ahora con un nuevo amigo.







































Fern

cuento Fernanda Gordillo

El deseo subconsciente de Mariana.

Muy poco sabía acerca de eso hasta que me ocurrió.
Yo era una adolescente “normal””, me gustaba salir con mis amigos, estar con mi familia y aunque suene raro me gustaba ir a la escuela… ¡A estudiar ¡
Creo que mi vida era perfecta hasta que, sucedió!!! Un día todo cambio, todo era distinto me empecé a dar cuenta que las cosas no estaban bien; creo que, me estaba enamorando. Si, si lo se eso no es tan grave, el problema era de quien…Mauricio!!! El niño mas guapo, lindo, divertido y, y, …¡Mi mejor amigo!
Todo es un lío pues ni mirarlo a la cara puedo, cada que se me acerca me tiemblan las piernas, la voz se me entrecorta y me sudan las manos. Es raro porque ni cuenta me di de cómo paso, simplemente sucedió.
Un día caluroso de verano, para ser exactos el último día de clases. Todos ansiábamos que ya diera la hora para que terminara la escuela y comenzara la diversión, prácticamente ya ni poníamos atención a lo que la maestra Regina nos estaba diciendo y eso que yo siempre fui muy buena para eso de las factorizaciones. Una vez que dieron las 2 en punto todos salimos corriendo y nos quedamos platicando afuera de la escuela en las jardineras que estaban a un lado de las canchas de básquetbol; prácticamente ese era nuestro punto de reunión. Ahí nos esperamos hasta que llegaron todos: Mau, Pepe, Rosita, Juan, Lalo, Lety, Pau, Pato y por supuesto yo, Mariana. Nos quedamos un buen rato ahí platicando pues todos iban a irse de vacaciones excepto Mau y yo, poco a poco cada uno se fue despidiendo pues al otro día partían a sus respectivos destinos. Primero se fue Lety Rosita pues casi son vecinas, después le siguió Juan, posteriormente se despidieron Lalo, Pau y Pato pues son hermanos y obviamente viven juntos y después aunque no queriendo le siguió Pepe quien muy efusivamente se despidió de los dos.
Y así fue, nos quedamos solos; nunca había sentido esa sensación tan extraña, es como un cosquilleo que te recorre todo el cuerpo. Nos quedamos callados durante unos minutos; debo aceptar que fue un poco incomodo, él no lo decía pero yo me di cuenta, se veía nervioso como si me quisiera decir algo pero no sabía como; hasta que él hablo y me dijo:
- Que te parece si vamos por un helado, yo invito y sirve que planeamos que vamos a hacer durante el verano y ya después te acompaño a tu casa.
- Bien, me parece muy bien.
Llegamos a la heladería de la señora Meche, muy conocida en la colonia pues sus helados son los mejores y mas ricos que pueden existir. Yo pedí uno de vainilla y Mauricio uno napolitano pues ese es su favorito desde siempre.
Platicamos largo rato y acordamos que todas las mañanas íbamos a salir a hacer ejercicio y en las tardes comenzaríamos un negocio de cuidar perros. Se que no se gana mucho pero preferiríamos eso a morir de aburrimiento.
Terminamos ese helado que por cierto nunca antes me había sabido tan rico como ese día, de hecho puedo afirmar que ese había sido el mejor helado de toda mi vida. Seguramente la señora Meche lo había hecho con mas entusiasmo o yo que se. Llegamos a mi casa y comencé a sentirme nuevamente muy extraña el cosquilleo por el cuerpo comenzaba, el sudor en las manos y unas ganas inmensas por abrazar a Mauricio y… besarlo!! ¡Que horror! Se trata de mi mejor amigo – pensé.
Hasta que él tomo la iniciativa. – bueno ya me voy, se está haciendo un poco tarde, espero la hayas pasado bien.
- si gracias, estuvo muy rico el helado, a ver que otro día lo repetimos. Contesté yo.
Y, de repente, se acerco para despedirse y sin pensarlo, me beso. Yo quedé como en shock, estaba tan impactada que no supe ni como reaccionar, lo que anhele toda la tarde se me había cumplido.
Mauricio no sabía ni que hacer, yo creo que ni él se lo esperaba, lo único que me dijo fue: - ¡perdóname!. Y salió corriendo.
Yo, por mi parte entre a mi casa aun si poder creer lo que había ocurrido. Bien recuerdo que no pude ni dormir, esa escena se repetía y repetía. Creo que nunca antes me había sentido así, era una sensación de ansiedad y confusión por no tener claro el porque el hizo eso.
Al día siguiente me levante y recibí una llamada muy temprano por la mañana, era él; Mauricio me había hablado para ver si pasaba por mí para ir a hacer ejercicio. La verdad con lo que había pasado un día antes ni me acordaba de nuestros planes. Le dije que estaba bien, que pasara por mí como a las 10; él llego puntual, lo invite a desayunar y no menciono absolutamente nada de lo ocurrido, era como si se le hubiese olvidado o no recordaba lo que había sucedido. Mi sentir fue algo extraño, pues me sentía confundida. En lo que desayunábamos me preguntaba: - Será, ¿que lo único que quería era jugar conmigo? No entendía que sucedía con su actitud pues él estaba como si nada y cada minuto que pasaba me daba mas coraje de que no mencionara nada al respecto y estaba aun más enojada pues no me atrevía a preguntárselo.
Terminamos de desayunar, salimos a correr al parque que esta como a dos o tres calles de la escuela, después dimos unas vueltas en bicicleta y después de cómo tres horas Mauricio me paso a dejar a mi casa; yo, amablemente lo invite a pasar pero no quiso, entonces entre por un vaso de agua para él y otro para mí y nos sentamos en la entrada de mi casa hasta que, por fin; lo mencionó.
Me dijo: -Mariana ahora si me puedes decir que te sucedió ayer, parecías ¡como muerta!
Yo, no entendía de que me estaba hablando y le dije: - ¿A que te refieres?, ¿De que me estas hablando?
-Pues de ayer, después de que fuimos por el helado te quedaste como que dormida en la heladería de la señora Meche, de hecho Luis el hijo de la señora y encargado de la heladería nos tuvo que traer hasta aquí, hasta tú casa.
- ¡No, puede ser!, porque tú me…
- ¿Yo que?, en la heladería estábamos platicando y de repente te recostaste sobre la mesa y de ahí ya no despertaste hasta hoy, de hecho hable a tu casa como a las 11 y tu mamá me dijo que seguías profundamente dormida.
- ¿Es verdad? O me quieres engañar para que olvide lo de que sucedió ayer.
- ¿Lo que sucedió ayer?, ¿De que? Si no me crees mejor pregúntale a tu mamá, ella fue la que abrió la puerta cuando te trajimos Luis y yo.
Yo, sin saber que decir ante esto conteste: - Esta bien al rato que llegue mi mamá le preguntare.
- Ok! Pero si tengo razón te toca invitar los helados a ti ¡eh!
- Sí, está bien yo los invitaré si tienes razón.
Me sentía tan desconcertada, no sabía que estaba ocurriendo pero decidí seguirle la corriente, porque en definitiva no estaba dispuesto a aceptar lo que había hecho.
-Bueno ya me voy porque me tengo que ir a bañar y quede de ayudarle a mi papá en arreglar unas cosas. Dijo Mauricio.
- Bien, entonces nos vemos hasta mañana.
- Si, a la misma hora paso por ti para ir a hacer ejercicio. Y por cierto no se te olvide preguntarle a tu mamá y a ver si recuerdas que te ocurrió porque si me preocupe un poco.
- Ja ja ja, está bien no te preocupes será lo primero que haga cuando llegue mamá. Nos vemos mañana, te vas con cuidado.
- Muy bien, si y gracias cuídate mucho y si puedo te hablo al rato, y sino hasta mañana.
Nos despedimos y él se fue en su bicicleta mientras yo esperaba en la entrada de mi casa a que se fuera. De pronto llego mi mamá, a la que por cierto ayer no recuerdo haberla visto y en la mañana tampoco, cuando había despertado ella ya no estaba en la casa.
Me saludo y yo sin pensarlo dos veces antes de que pasara otra cosa le pregunte:
- ¡Mamá!, ¿es verdad que ayer Mauricio me trajo y yo venía dormida?
- Sí. Me contestó ella. – Ese niño venía muy preocupado pero se tranquilizo con lo que le dije.
- Mmm… ¿Cómo? ¿Qué le dijiste?
- Pues que estas tomando medicinas muy fuertes y que seguramente te la tomaste poco antes de estar en la heladería y eso fue lo que te paso. Acuérdate que con esas pastillas te quedas profundamente dormida.
- ¡No puede ser! Es verdad, olvide que esas pastillas me las tengo que tomar cuando estoy en casa o sino me quedo profundamente dormida en cualquier lugar y lo peor es que muchas veces se me olvidan las cosas. ¡No lo puedo creer! Como pude a ver sido tan tonta, lo olvide por completo y ¡casi hago el oso de mi vida!
- ¿De que hablas?, ¿A que te refieres?, ¿Segura que todo esta bien?
- Sí, má no te preocupes es solo que tienes una hija muy pero muy despistada y desde hoy trataré de poner mas atención a mis cosas.
- Está bien, solo espero que no estés en malos pasos. Me dijo ella.
Yo solo sonreí y mamá entro a la casa pues ya estaba muy cansada. Y fue hasta entonces, después de que platique con mi mamá que recordé.
Esa mañana como ya se me hacía tarde para la escuela agarre un paquete de mis medicinas pero sin darme cuenta agarre el equivocado; el que solo me tomo cuando estoy en mi casa pues hace que caiga en un profundo sueño, cuando llegue a la escuela lo olvidé por completo, lo único que me paso por la cabeza era que tenía que tomarme mis pastillas. Cuando lo hice en ningún momento se me ocurrió ver el nombre de la medicina, yo solo me la tome y me hizo efecto hasta que estábamos en la heladería de la señora Meche.
Si, eso fue. Seguramente estaba soñando, la verdad es que últimamente pensaba mucho en Mauricio y en que nos conocíamos desde siempre y en el que pasaría si llegáramos a hacer más que amigos. Si, suena estúpido lo se, yo también lo pensé pero seguramente me quede con esa idea y por eso fue ese sueño tan extraño.
En verdad me moría de la pena. Después de una rato entre a mi casa, cenamos, después me acosté y vi un poco de televisión. Como unos 15 minutos después sonó el teléfono; era Mauricio y yo apenadísima:
- Hola ¿Cómo estás? ¿Ya hablaste con tu mamá?
- Si, ya lo hice pero tú porque no me dijiste nada, yo me puse a pensar tantas cosas.
- Pues nada mas, lo hice para ver que tan mala memoria tenías. Ji ji ji. Pero ahora, ¿Cómo estás?
- Ahora que ya se lo que sucedió y que pude recordar, pues mas tranquila.
- Bien, entonces que no se te vaya a olvidar que me debes un helado ¡eh!
- No, no te preocupes ya no se me olvida. Bueno ya me voy porque este día ha sido muy pesado y con muchas sorpresas.
- Ok! Entonces te veo mañana. Que descanses.
Esa noche dormí tan tranquila, recordando con humor lo que me había sucedido. Hasta ahora sigo sin tener una explicación clara de lo que ocurrió, lo mas seguro es que mi subconsciente me traicionó o algo así.
En fin me encuentro muy feliz porque Mauricio y yo pasamos todo el verano haciendo cosas juntos, nuestra amistad cada día es mejor y desgraciadamente las vacaciones ya se nos han acabado. Justamente nos queda una semana, y nuestros amigos Pepe, Rosita, Juan, Lalo, Lety, Pau y Pato regresan entre hoy y mañana. Mau y yo les estamos preparando una fiesta de bienvenida; sabemos que no se fueron por mucho tiempo pero para nosotros los pretextos son los que sobran para compartir y festejar.
Y sobre mi pequeño incidente solo quedo el recuerdo y una anécdota más para contar y espero que no me vuelva a pasar algo parecido. Ahora trato de ser más cuidadosa y menos despistada.

cuento amelia sanchez

NUNCA SABES CON QUIEN ESTAS Y QUE PASARA

INICIO
Yo era una persona muy responsable, muy atenta, hija de familia con status económico medio-alto, las personas me distinguían por mi carisma que representaba en lo exterior, pero realmente lo que no sabían es que dentro de mi había un vacío que no me dejaba respirar que se quedo en mi mente de por vida.
CLIMAX
Un día que me encontraba en la sala de la casa de mi mamá y padrastro cuando un viento enorme entro por la ventana, sus sonidos se escuchaban hasta el final del condominio en el que vivíamos, mi mamá se asusto mucho, el corazón le latía muy fuerte, me gritaba que la ayudara pero yo no podía hablar, fue cuando una espíritu entro por esa ventana, viendo me a los ojos con una intensidad maligna, ella se acercaba más y más a mi pero un grito de terror la distrajo era el de Rubén el hijo de mi Padrastro y el cual hizo llamarle la atención a la mujer y se apodero de su cuerpo.
El cambio de Rubén se volvió maligno, terrorífico empezó hablar de un modo diferente, fue cuando mi mamá, mi padrastro y yo nos quedamos en shock; creíamos que nuestras vidas se iban a derrumbar pero el amor que teníamos por Rubén iba mas allá, y queríamos que el alma de esa mujer saliera por completo del cuerpo de Rubén, el nos miró y al minuto desapareció.

En ese momento nos dirigimos a la biblioteca a buscar si había una razón científica por el acontecimiento, pero no lo hubo, nos quedamos días esperando que Rubén o el espíritu de la mujer apareciera, los minutos eran aterradores.
Uno de los tantos días en que estábamos buscando una respuesta, se volvió a escuchar el mismo viento entrando por la ventana, mi mamá vuelve a gritarme pero el grito de mi padrastro distrajo de nuevo a la mujer y ella se acerco a el, metiendo se a su cuerpo, el vuelve hablar de un modo extraño, se nos queda mirando, y vuelve a desaparecer, dejando nos a i madre y a mi sin aliento nos miramos y pensábamos en si la mujer volvería por nosotras y que pasaría con Rubén y con mi Padrastro; volvimos a esperar, sucedió lo mismo con mi mamá fue poseída por la mujer; y mi incertidumbre era a un más fuerte por que yo era la única que quedaba en esa casa. Lo único que anhelaba era que esa mujer regresara por mi y fuese a donde me llevara iba a estar a lado de mi familia; y fue lo que paso la señora volvió por mi y me llevo.
Al momento de que la mujer me poseía sentía una sensación de impotencia de no poder salir de ella que su alma, tan malvada había entrado a mi, y fue cuando me llevo a un lugar con mucho humo en el cual no se podía observar nada, yo le gritaba a mi familia pero no escuchaba ninguna respuesta hacía mi fue cuando entre, a un bosque en el cual se encontraba la mujer al final de el, yo corrí hacía ella tratando que me diera una explicación de donde estaba mi familia, cuando llegue frente a ella la mire pero no le podía ver los ojos, lo único que hizo ella fue señalar a otro lado, en donde se encontraba mi familia, los mire, los abrasé y los besé pero ellos no me reconocían, me rechazaban.
FINAL
Con el dolor que tenía en el alma, corrí y corría hasta legar a una cascada enorme la cual de lo grande y fuerte que era no tenía fin, fue cuando el dolor me mato y decidí arrogar me en ella. Cuando volví a caer sentada en la misma sala de la casa de mi madre y Padrastro creyendo que era un sueño, cuando vuelve a entrar el viento sobre la ventana apareciendo se de nuevo la mujer, me miro, le pregunte llorando que por que había pasado eso y ella me respondió, me dijo que por que mi alma no pertenecía a ese mundo, que era el mundo del más allá donde las personas malas se iban y que yo no era una de ellas, preguntando me por que tanto mi mamá como Rubén y mi Padrastro estaban en aquel mundo, y la respuesta fue por que ellos aunque no habían hecho un mal en ese momento, si lo iban hacer si ella no intervenía; provocando que yo fuera una persona muy desdichada, como otros actos como el de haber sido violada por Rubén y por mi propio Padrastro.
Mi mente no lo podía creer yo lloraba y lloraba, y ella me dijo que en el momento en que ellos en el otro mundo limpian sus almas, regresarían conmigo y seriamos felices por siempre, y ella desapareció.
Pasaron 6 años, 5 meses y tres días cuando yo no dejaba de pensar sentada en el mismo sillón cuando volverían; cuando en ese momento volvió a entrar un viento por la ventana pero esta vez no apareció la señora , solo se escucho la voz de mi madre gritando me que la ayudara en la cocina, yo la abrace fuertemente y me prometí nunca decir nada de lo que me había sucedido y mi vida volvió a empezar.

ZAGGI CREW

jueves, 17 de abril de 2008

Escritura Creativa Adriana Martínez Castillo

Manual de creación literaria


1. ¿Cuál es el rasgo que distingue los cuentos y novelas de los escritores profesionales realizados por los escritores principiantes?
R. El manejo de la historia subterránea y la pericia para jugar con la imaginación del lector.

2. Menciona los dos tipos de plano de ficción.
a) Uno: el del personaje del cuento que quiere leer una novela.
b) Dos: el de la novela donde un par de amantes adúlteros fraguan el asesinato del marido de ella.

3. Menciona una de las características más importantes de la literatura.
R. La verosimilitud.

4. ¿Qué es la verosimilitud?
R. Es la característica que permite que nos perdamos en la dimensión literaria, que en cuanto el texto de despliega ante nosotros nos envuelva y nos sumerja en ese mundo del que el texto habla.

5. ¿Qué es y que es lo que hace el Narrador autodiegético?
R. Es aquel que cuenta su propia historia, normalmente se escribe en primera persona, y para que la historia sea consiente con la perspectiva adoptada, queda manifiesto que el narrador tiene una conciencia parcial de los hechos.

6. ¿Qué es y que es lo que hace el Narrador intradiegético?
R. Es aquel que cuenta desde dentro de la historia, como testigo o personaje secundario, la vida del grupo de personajes a los que pertenece. Aquí la persona adoptada puede ser la primera, la segunda o la tercera.

7. ¿Qué es y que es lo que hace el Narrador extradiegético?
R: Es ajeno a la historia y habla desde el limbo como si fuese Dios. Este narrador es el que mejor se presta a la tercera persona pues, por lo general, puede pasear por los recovecos más secretos de los personajes.


8. Menciona dos dificultades que la literatura enfrenta para conseguir la velocidad.
R. Uno, la palabra: está obligada a desplegarse lentamente.
Dos, que su máximo ofrecimiento: la verdad del hombre, requiere de toda la demora.

9. ¿Qué es la “Economía expresiva”?
R. Se define cuando quieres expresar y narrar algo, pero ahorrando y utilizando menos palabras y ser directo.


10. ¿Cómo debe de ser la economía expresiva?
R. La economía expresiva no tiene tanto que ver con ser escueto, sino con ser exacto.

11. ¿Da un ejemplo de cómo debe de ser la economía expresiva?
R. La economía expresiva no hay que entenderla como una cuota reducida de palabras, sino como la adecuación exacta de las palabras y el diseño de la obra con lo que precisamente uno quiere decir: no es breve, sino ser preciso.

12. ¿Qué es la paráfrasis y menciona un ejemplo?
R. Es falso que existan palabras sinónimas o expresiones equivalentes: la paráfrasis sólo en apariencia permiten decir de mil modos distinto “lo mismo”. No hay que hacer paráfrasis, sino encontrar el mejor modo de decir lo que queramos decir.

13. ¿ Qué es lo que dice Horacio Quiroga de la economía expresiva?
R. Dice de la economía expresiva que si quieres expresar con exactitud esta circunstancia, no hay lengua humana más palabras que las apuntadas para expresarla.

14. ¿Cuál es la función de la primera y la segunda persona?
R. Primera persona, permite dar al texto un carácter testimonial, confidencial,, íntimo; al escribir desde el yo la historia adquiere una tesitura subjetiva.

Segunda persona, es espléndida para la imprecación para adoptar un tono de advertencia y adquirir una cierta superioridad frente al personaje.

15. ¿Cómo es la tercera persona?
R. Tercera persona, es la persona más frecuente en la literatura y crea en el lector la sensación de que se halla platicando con el narrador y éste le cuenta la vida y milagros del personaje.