Mis Zapatos….
A los 3 años aproximadamente recuerdo bien que tenía unas pantuflas de perrito, eran cafés y muy pequeñas. Estas pantuflas me encantaban, las llevaba a todos lados; siempre en las mañanas cuando despertaba iba por mi leche y después salía al jardín, me sentaba y así, en pijama con mis respectivas pantuflas y mi leche salía a “tomar el sol” y lo disfrutaba mucho. Recuerdo mucho estas pantuflas porque casi nunca me quería desprender de ellas y pues como estaba pequeña me encantaba que fueran de algún animalito. Después de un tiempo me tuve que desprender de ellas pues aparte de que ya estaban muy viejas tampoco me quedaban.
Posteriormente cuando crecí recuerdo que; como padecía de pie plano, tenía que usar zapatos ortopédicos que por cierto eran horribles y nunca me gustaron y los tuve que usar durante 4 años aproximadamente. Después de que deje de usar los zapatos ortopédicos fui muy feliz pues ya podía usar el tipo de zapato que yo quisiera. En si, no soy mucho de utilizar zapatos, me gustan mas los tenis pues van mas con mi forma de ser, relajada y con cierto toque de informalidad claro que, obviamente cuando tengo utilizar zapatos para un evento en el que se requiera formalidad lo hago aunque muy a mi pesar, pues eso de la formalidad no va mucho conmigo.
Creo que es importante que al adquirir un par de zapatos, sean con los que nos sintamos a gusto y cómodos; que nos gusten y obviamente que utilicemos.
Los zapatos de todo tipo me van a acompañar siempre durante toda mi vida puesto que es un accesorio indispensable, no solo para mí sino también para todas las personas, ya que son los que de cierta forma protegen a nuestros pies; pues sería muy incomodo andar sin zapatos por las calles todas llenas de baches, vidrios, basura y cosas que puedan lastimarnos y causarnos algún dolor; así que seria bueno reconocer que los zapatos son parte fundamental de nuestras vidas pues todos los días los utilizamos y casi nunca nos despegamos de ellos.
A los 3 años aproximadamente recuerdo bien que tenía unas pantuflas de perrito, eran cafés y muy pequeñas. Estas pantuflas me encantaban, las llevaba a todos lados; siempre en las mañanas cuando despertaba iba por mi leche y después salía al jardín, me sentaba y así, en pijama con mis respectivas pantuflas y mi leche salía a “tomar el sol” y lo disfrutaba mucho. Recuerdo mucho estas pantuflas porque casi nunca me quería desprender de ellas y pues como estaba pequeña me encantaba que fueran de algún animalito. Después de un tiempo me tuve que desprender de ellas pues aparte de que ya estaban muy viejas tampoco me quedaban.
Posteriormente cuando crecí recuerdo que; como padecía de pie plano, tenía que usar zapatos ortopédicos que por cierto eran horribles y nunca me gustaron y los tuve que usar durante 4 años aproximadamente. Después de que deje de usar los zapatos ortopédicos fui muy feliz pues ya podía usar el tipo de zapato que yo quisiera. En si, no soy mucho de utilizar zapatos, me gustan mas los tenis pues van mas con mi forma de ser, relajada y con cierto toque de informalidad claro que, obviamente cuando tengo utilizar zapatos para un evento en el que se requiera formalidad lo hago aunque muy a mi pesar, pues eso de la formalidad no va mucho conmigo.
Creo que es importante que al adquirir un par de zapatos, sean con los que nos sintamos a gusto y cómodos; que nos gusten y obviamente que utilicemos.
Los zapatos de todo tipo me van a acompañar siempre durante toda mi vida puesto que es un accesorio indispensable, no solo para mí sino también para todas las personas, ya que son los que de cierta forma protegen a nuestros pies; pues sería muy incomodo andar sin zapatos por las calles todas llenas de baches, vidrios, basura y cosas que puedan lastimarnos y causarnos algún dolor; así que seria bueno reconocer que los zapatos son parte fundamental de nuestras vidas pues todos los días los utilizamos y casi nunca nos despegamos de ellos.
Por: Ma. Fernanda Gordillo Lima
No hay comentarios:
Publicar un comentario