viernes, 7 de marzo de 2008

Hablemos un poco de mi ... vivis

Hablemos un poco de mí…

Mi nombre…, es lo de menos. Puedes llamarme Vivi. No te contaré de dónde vengo o a donde voy, ni cual ha sido la razón por la que estoy aquí. Esta ocasión quiero hablarte de algo más íntimo, de algo más vivo dentro de mí que quiero que conozcas.
Es algo así como la esencia que me compone; las cosas que me gustan, que me identifican, algunas virtudes, lo que me emociona y mueve a seguir siempre “un paso adelante”.

Comenzaré por el football, mi deporte favorito
La locución, mi sueño escondido
La ternura, una inquilina en mi corazón

Sensible, es mi ropaje de diario
Perico, la mascota con que hablé y sentí que me entendía
Fotografía, mi hobbie de toda la vida.

Naturaleza, bella madre que me cuida
Viento, amigo que me acaricia cunado he perdido el aliento
Libertad, sensación deliciosa de poder optar

Ave, animal que hubiera deseado ser
Frescura, temperatura del ambiente que me gusta percibir
Afecto, sentimiento preferido

Niños, los seres que alumbran mis tardes
Animales, criaturas puras e inocentes
Plantas, las dueñas de mi paz interna

Verde, el color perfecto y natural
Alegría, una chispa que solo trae bienestar
Euforia, aquello que hay que dejar salir para no llenarme de emociones

Sencillez, como pienso que deberían ser todos
Originalidad, un brillo que me da alas
Incógnita, lo percibo cuando varios ojos me ven

Filosofía, me acompaña en mis andares una y otra vez
Ludismo, inquietante más famoso
Empatía, mi secreto para con los demás

Confusión, la que me atrapa en los momentos más difíciles
Oratoria, lo que me inspira a hablar
Diversión, la magia de la vida

Vegetales, aliados de mi salud
Nutrición, necesidad de mi cuerpo
Juego, entretenimiento adictivo

Risas, compañeras de buenos momentos
Dolor, lo que lastima mi interior
Actitud, quien me toma de la mano y me impulsa más allá de lo imaginable

El dibujar, reír, animarme, ayudar, concientizar y jugar, me producen un gusto magma.
Mientras que deprimirme, sentir frialdad, ver maltrato de animales y plantas, personas que se cierran, el dolor del alma… marchitan enormemente mi espíritu.

…y así, cada una de estas características, sumadas a otras más, es lo que hacen de mí lo que soy, lo que describe más enteramente mi espíritu, me hace diferente a unos, y me relaciona con otros. Lo que habla un poco de mí… J

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